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Tripofobia: la aversión que descoloca completamente al actor Jaime Lorente

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Jaime Lorente presenta la última película en la que ha participado 'Disco, Ibiza, Locomía'

El actor murciano visitó anoche el irreverente late night de Marc Giró para presentar el nuevo largometraje del director Kike Maíllo, Disco, Ibiza, Locomía. Un drama que narra la loca historia de Locomía, la banda de electropop que triunfó a finales de los 80 y principio de los 90 y con la que nació el boom de las grandes discotecas ibicencas. En ella Lorente interpreta a Xavier Font, el controvertido líder de la banda que quería dedicarse a la moda y accidentalmente terminó vendiendo millones de discos al otro lado del charco sin tener ninguna habilidad musical.

Jaime Lorente en Late Xou  con Marc Giró

Jaime Lorente en Late Xou con Marc Giró

Lorente entraba en el plató de Late Xou a ritmo de Supersubmarina, canción de su elección porque, en sus palabras, "yo hago de promo de todo" refiriéndose a la película de Maíllo y al último libro sobre la banda jienense escrito por el periodista Fernando Navarro: Algo que sirva como luz. El actor, que no había nacido en la época que despuntaba Locomía pero asegura sentirse "hijo de", aunque no tenía ningún recuerdo pero considera que la banda de Xavier Font pertenecen al imaginario colectivo. El invitado le hizo una magistral demostración a Giró de cómo se usan los icónicos abanicos que inmortalizaron al conjunto ibicenco.

Como ningún invitado que venga a promocionar su trabajo se libra de las pesquisas del equipo de redactores del Late Xou, Giró sacó la artillería pesada y preguntó al intérprete por una aversión muy particular que le sobrepasa: la tripofobia.

¿Qué es la tripofobia?

Se trata de una aversión más habitual de lo que parece, es el miedo a patrones repetitivos orgánicos o fobia a los agujeros. Parece ser que es un miedo adquirido de componente evolutivo, ya que muchas de las especies venenosas de la naturaleza poseen este tipo de patrones geométricos. El actor compartió una divertida anécdota confesando haber descubierto que tiene esta fobia gracias a los pasajeros de los aviones que regresan de Turquía para tratarse la alopecia. "Todos los puntitos que les salen me daban mucho asco y mi cuñada, que es psicóloga, me dijo: tú eres tripofóbico".