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Con escasas horas de luz y con un único médico en cada base: así viven los españoles en la Antártida

  • A través de la mirada del youtuber Rubén Díez (Lethal Crysis), Destino Antártida muestra los detalles de las bases españolas en el continente más remoto
  • Los cuatro capítulos ya están disponibles en Playz
  • La 2 emitirá desde el 9 de junio un capítulo cada domingo

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Lethal Crysis en una de las bases españolas en la Antártida
Lethal Crysis en una de las bases españolas en la Antártida

¿Imaginas vivir durante meses en el continente más desierto del mundo? Hablamos de la Antártida y, por insólito que parezca, hay expediciones que se mantienen asentadas allí con el único fin de investigar un terreno del que aún queda mucho por explorar. En los cuatro capítulos de Destino Antártida, serie documental de Playz conducida por Lethal Crysis, podrás descubrir todo tipo de curiosidades sobre este lugar y los proyectos que anualmente se llevan a cabo allí. "Aquí todos tenemos que colaborar. Da igual que seas mecánico, científico o jefe de la base. Hay que recoger la base, limpiar, tostar el pan por las mañanas...", argumenta Lethal durante su estancia en una de las bases españolas en la Antártida. ¿Quieres saber cómo viven los españoles de las expediciones? ¡No te lo pierdas!

Así es 'Destino Antártida', la nueva serie documental conducida por Lethal Crysis

La salud mental, el principal reto de las expediciones

Iris Mar Fernández, médica en la base española Juan Carlos I, es la única sanitaria en kilómetros a la redonda. El reto de saber que todo el peso recae en ella es una de las presiones con las que tiene que lidiar diariamente: "Siempre me habían gustado las expediciones, así que me surgió la oportunidad de venir aquí ejerciendo mi profesión y fue un auténtico regalo. Yo venía de estar trabajando en una UVI en Madrid y al final estás pendiente de que te llamen a cualquier hora. Vas allí y muchas veces no sabes lo que te espera, así que esa incertidumbre la tengo muy calmada por la práctica. Pero sí piensas: "si tengo algo muy gordo, voy a estar muy vendida". El problema de la medicina polar es precisamente ese, que puedes tener una evacuación en horas, días o semanas. Todo depende de las condiciones metereológicas. En el mejor de los casos, podría producirse la evacuación en 15 horas". En este sentido, Javier Martín, predictor del grupo antártico de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), confirma la dificultad que puede acarrear tener visibilidad reducida durante la navegación: "Viene mal tiempo y el paso de Drake se plantea complicado para llegar a las Islas Shetland. Confluye todo el viento, se acelera y es difícil realizar el viaje".

Al estar aislado durante meses, uno de los mayores desafíos de todos los trabajadores de las expediciones antárticas es, sin duda, el de la salud mental. "Necesitas muchos autocuidados por tu parte. Sino problemas como el insomnio o la ansiedad están muy presentes. Hay días de completa oscuridad, así que puede haber incidencias de depresión mucho mayores que en cualquier otro sitio. Aquí tenemos también una psicóloga que hace terapia online desde España para hacerse cargo de estos casos", continúa explicando Iris.

La conectividad, el gran aliado de la base

Didac Casado Rodríguez, técnico informático y de comunicaciones de la base española Juan Carlos I, explica el gran trabajo que se encuentra detrás de la posibilidad de mantener una simple videollamada con tus seres queridos desde la Antártida: "Toda la tecnología ha cambiado y ahora es muy económico tener formas para poder comunicarte. Cuando estás tanto tiempo fuera de casa, con tener la imagen de tu familia, al final sonríes porque eres feliz de que pese a estar en la otra parte del mundo, ¡puedes hablar con tu gente! Esto te tiene que apasionar mucho, y en mi caso lo mezclo con foto y vídeo para poder llevar a casa este tipo de contenidos".

Jordi Vilaseca Rodríguez, mecánico en la base española Juan Carlos I, es la persona que más campañas lleva a sus espaldas: ni más ni menos que 21. "El hecho de reinventarte cada día y buscar retales de material para que al final puedas solucionar el problema es lo que me encanta. A mí me salió la oportunidad de ir a Groenlandia pero no pude realizarlo. En 2018 me separé y se me abrió el abanico de poder hacer este tipo de viajes. Como hay temporadas que tienen 24 horas de luminosidad, es necesario dormir con antifaz y las cortinas completamente echadas. A pesar de las dificultades, mi sueño es permanecer un invierno entero aquí, sin apenas ningún rato de luz solar. El problema principal que tenemos es: si te ocurre algo, ¿cómo lo hacemos? Las aguas se congelan y la logística se complica muchísimo para poder subsistir. Si en casa tienes una situación delicada, estar aquí se te hace muy cuesta arriba. Al final solo tienes la posibilidad de dar soporte a través de llamada o videollamada, pero no es lo mismo. Estos son los días que más cuestan".