La experiencia paranormal que sorprendió a Canela Peña en el teatro

• La actriz compartió una anécdota que había prometido contar en su próxima colaboración en el late night de los martes
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La experiencia paranormal de Candela Peña en el teatro

La pasada noche pudimos disfrutar en Late Xou con Marc Giró de la divertidísima sección de la querida colaboradora del programa Candela Peña. Hace tan solo 3 semanas, la gavanense en calidad de invitada para hablar del arrollador éxito de su participación en el true crime de Netflix basado en el Caso Asunta. Tras su paso no pudimos comprobar en redes sociales que la química existente entre Giró y Peña trasciende la pantalla y el sofá de los invitados, ya que este par acostumbra también a liarla entre bambalinas.

Peña prometió en su última visita a Late Xou que a su regreso contaría una anécdota que le sucedió recientemente, reservada para el divertidísimo programa de anoche que también contó con invitados/as de excepción como Karra Elejalde y Georgina Amorós y el mediático diseñador de moda Eduardo Navarrete.

Peña entró exultante con unas gafas enormes de pasta y un peinado cardado que, según ella, se ha inspirado Miley Cyrus. Pero antes de lanzarse a contar la prometida anécdota, Peña derrochó esa autenticidad que la caracteriza bromeando con Giró sobre cómo el éxito la ha convertido en toda una "narcisista egocéntrica que no saluda por la calle porque solo quiere dinero". Finalizadas las bromas, Peña comenzó a contar su historia advirtiendo que "lo iba a contar de una manera muy arte puro". Y así fue

Experiencia paranormal en el Borrás

En el conocido teatro barcelonés, la actriz estuvo recientemente interpretando, junto a su gran amiga Pilar Castro, la obra Contracciones. Para incentivar la venta de localidades, a Peña se le ocurrió proponer realizar una coloquio al finalizar la representación para comentar la obra. "¿Tú no no notas que aquí, de repente, hay alguien que tiene una energía negra y a ti te llega?", preguntaba la intérprete a a Giró, aclarando que "no es que crea en ellas pero las siente". Fue a partir de este coloquio cuando Peña comenzó a sentir una extraña presencia que, aunque no conseguía reconocerla, la sentía. Día tras día, fue sintiéndola hasta que la presencia se le manifestó en forma de una mujer que la arrinconó contra la pared diciéndole: "No la invoques, no la invoques". La desconocida en cuestión se refería a Rosario Porto, la madre de la niña asesinada Asunta Basterra, que en aquel momento interpretaba. A lo que Peña, sin amedrentarse, ella, sin pensarlo mucho, respondió: "mi padre es brujo" devolviéndole el susto.