¡César e Inés han vuelto!
- El gerente del Madrid Cabaret decide romper con Inés
- Ella no está conforme y decide luchar por su amor
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La pareja formada por César e Inés, conocida en redes como ‘Inesar’, parecía haber llegado a su fin. Su amor ha sufrido una transformación muy lenta de amigos a pareja, y, por un breve periodo de tiempo, amigos de nuevo. César tomó la decisión de romper por el bien de Inés, pero ella ha decidido que quiere luchar por su amor y por la persona en la que cree que se ha convertido César. Ella está dispuesta a luchar, pero... ¿Qué le responderá él?
El pasado de César le persigue
Es difícil no recordar la llegada de César Morel al Madrid Cabaret y pasar por alto que su pasado llamaba a su puerta. Fueron muchas veces las que César se arrepintió de dar un paso al frente en su amistad con Inés. Él no quería confundirla, pero es cierto que Inés terminó reprochándole sus cambios bruscos de actitud y fue ahí cuando César se sinceró con ella y le habló de la metáfora del escorpión, basada en la fábula del escorpión y la rana.
En esta historia, un escorpión le pide a una rana que lo ayude a cruzar de una orilla a otra del río. La rana, temerosa de ser picada, duda al principio, pero el escorpión promete no hacerle daño, argumentando que, si lo hiciera, ambos morirían. Confiando en sus palabras, la rana accede y lleva al escorpión en su espalda mientras nada a través del río. A mitad de camino, el escorpión pica a la rana, sellando el destino de ambos. Ante la pregunta de la rana sobre por qué rompió su promesa, el escorpión simplemente responde que es su naturaleza y que no pudo evitarlo.
El gerente del Madrid Cabaret se siente como ese escorpión que no quiere hacer daño y quiere avanzar, pero su pasado le persigue. Su trabajo en Marsella, donde estuvo a punto de matar a alguien, le hace querer huir del hombre en el que se convirtió. Así fue como acabó en Madrid tras un año desaparecido, pero hay cosas que no se pueden dejar atrás, y los negocios en los que estaba metido en Marsella son muy oscuros y poderosos como para no querer volver a buscarle.
El regreso de Marcel a la vida de César
Marcel fue un antiguo compañero de César en Marsella, y un día apareció en el Madrid Cabaret para proponerle un negocio. En realidad, César no tenía mucho margen de negociación, pues sabía que la idea de Marcel era una orden directa de sus antiguo jefes, gente muy poderosa y peligrosa a la que no podía enfrentarse, y más cuando Marcel amenazó con hacer daño a Inés si no hacía lo que le pedían.
Así fue como César permitió que Marcel y sus amigos fuesen dejando bebidas de licores en el almacén del Madrid Cabaret con intención de vendérselas a otros negocios de la zona. Fueron varias las complicaciones que amenazaron la tranquilidad de César. Primero fue un robo que se cometió en el local de Íñigo. Fue uno de los trabajadores de Marcel que se coló en el local con las llaves que César le dejó a Marcel y robó toda la recaudación de una noche. Aquello provocó la rabia de César, pero siguió trabajando con Marcel porque no tenía alternativa, pero en los últimos días ha descubierto algo que lo ha cambiado todo.
César decidió revisar una de las entregas que hacían los trabajadores de Marcel. Al abrir las cajas, el gerente del Madrid Cabaret se dio cuenta de que había un doble fondo y tras él se escondían varios paquetes de narcóticos. Su enfado se hizo notar y en cuanto tuvo la oportunidad de decirle a Marcel que lo había descubierto todo, aprovechó y le dijo que el negocio y el trato al que habían llegado debía terminar. Sin embargo, Marcel le explicó que era una operación muy grande y que no podía hacer eso. “Es una operación a gran escala y hay muchos países implicados”, le explicó Marcel dejando a César contra las cuerdas. El negocio era más grande de lo que se imaginaba y la gente poderosa que estaba detrás podría tomar graves represalias contra él, por lo que, una vez más, decidió callar.
Don Fermín protege a Inés
Don Fermín ha acudido al Madrid Cabaret para ver a su sobrina y entregarle un regalo, pero no se ha encontrado allí a Inés. Quien sí estaba era César, y el dueño del salón de té no ha dudado en aprovechar la ocasión para hablar con el gerente del Madrid Cabaret. “Le pido disculpas por si le resulto demasiado directo, pero me gustaría saber cómo va su relación con mi sobrina”, le ha preguntado don Fermín a César.
César se ha extrañado por la pregunta y se ha puesto a la defensiva explicando que cree que Inés no tenía queja alguna, pero don Fermín le ha hecho saber que no ha sido Inés quien le ha dado la voz de alarma, sino Laurita. “Noté que Laurita se tensaba”, le ha dicho don Fermín al novio de su sobrina. Después no ha dudado en dejarle claro que ya tuvo sus problemas cuando llegó e investigó su pasado, algo que estaría dispuesto a pasar por alto si lo que sintiese por Inés fuese real.
“Yo quiero saber si usted ama a mi sobrina”, le ha preguntado el tío de Inés a César. “La amo”, le ha respondido sin dudar. “En ese caso, solo le recuerdo que mi sobrina es una muchacha joven con toda la vida por delante”, le ha explicado don Fermín. “Lo sé, por eso intento tratarla con todo el cariño y delicadeza que sé”, le ha reprochado César.
Sin embargo, no ha sido suficiente para don Fermín que ha hecho hincapié en el gesto que tuvo al no oponerse a que mantuvieran una relación y dejar de investigar su pasado y también al dejarle claro que eso puede cambiar en cualquier instante. “Espero que no me defraude. Y, si de verdad quiere a Inés, si de verdad la ama, sea siempre honrado con ella, protéjala, cuídela, pero, sobre todo, sea sincero, no la oculte nada. Ya ve, tan solo le pido lo que mi sobrina se merece”, ha terminado diciendo el dueño del salón de té. “Lo intentaré con toda mi alma”, ha respondido César.
César decide romper con Inés
Esa conversación entre don Fermín y César le ha hecho pensar y ha tomado una drástica decisión que Inés no se ha tomado nada bien. César ha intentado hablar con ella, pero ella ha seguido bromeando con su particular forma de ser. “Va a ser complicado vernos esta semana, pero es lo que tiene la vida de los artistas, no haberte enamorado de una cantante. Somos complicadas”, le ha dicho Inés. “Entonces lo mejor es que lo dejemos aquí”, le ha dicho César aprovechando el comentario de Inés.
Inés se ha quedado estupefacta, y más cuando él ha tratado de convencerla de que lo hacía por su bien. Ahora que su carrera va a despegar y que debe empezar a volar libre, cree que es el momento de acabar con su relación, pero Inés no se ha creído nada. “¿Qué ocurre?”, le ha preguntado Inés. “Que te has enamorado de un hombre que no conoces, Inés. Está en mi naturaleza, tarde o temprano te voy a hacer daño, si no te lo he hecho ya”, le ha contestado César antes de marcharse al almacén.
No sabemos si volveremos a ver a Inés y César juntos algún día, pero está claro que la vida de César está tomando un camino cada vez más peligroso, y él pretende proteger a Inés y la forma que ha encontrado de hacerlo es terminando con su relación.
Inés decide pelear por César
Inés se ha pasado toda la noche en vela pensando qué ha podido pasar para que César haya tomado esta drástica decisión. "Ayer no podía parar de llorar hasta que me di cuenta de que solo hablaste tú, es que yo ni siquiera te pregunté", le ha dicho Inés antes de explicarle que no acepta la ruptura. "Los dos deberíamos estar de acuerdo en terminar esta relación y resulta que yo no lo estoy", le ha dicho la hermana de Laurita a César en el Madrid Cabaret. "Inés, tengo un pasado y no quiero involucrarte", le ha replicado César.
Sin embargo, Inés no ha dudado en dejarle claro que le da igual su pasado. "Lo único que me importa es nuestro pasado y nuestro futuro. Sé que Marcel no te lo está poniendo fácil, pero yo solo veo dos opciones: o te rindes, o luchamos juntos", le ha dicho Inés. "Mira que eres testaruda", le ha respondido César antes de coger la mano de Inés y prometer que pasarán la noche juntos.