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El hidrógeno dorado: una fuente de energía natural bajo los Pirineos

  • El hidrógeno dorado se forma mediante ciertos procesos naturales, como la interacción de minerales con el agua
  • El uso del hidrógeno verde como productor de energía sostenible gana relevancia en el contexto de la crisis climática actual

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El hidrógeno dorado: una fuente de energía natural bajo los Pirineos
Jordi Tritlla y Pere Estupinyà en una fuente natural de hidrógeno dorado, en el Pirineo Francés.

En la lucha contra el cambio climático, uno de los principales retos recae en la descarbonización, es decir, el proceso de reducción progresiva de las emisiones de carbono a la atmósfera. En este marco, el hidrógeno se ha convertido en una de las opciones más señaladas para afrontar el cambio. Su obtención depende generalmente de la combinación de otros compuestos, entre los que se encuentran los hidrocarburos (el carbono y el hidrógeno), el agua (oxígeno e hidrógeno) o materias que pueden ser tanto orgánicas como inorgánicas.

Contaminación

Se extrae mediante técnicas muy variadas, clasificadas según su el grado de contaminación que genera su producción, dependiendo de lo limpio que sea el proceso y de la fuente prima de la que provenga.

El más contaminante es el hidrógeno marrón o negro, que se desarrolla mediante un proceso en el que se transforma en carbón sólido en un gas rico en monóxido de carbono e hidrógeno. Después está el gris, a partir de gas natural, donde el metano y el vapor del agua del combustible fósil se convierten en hidrógeno y dióxido de carbono. El azul, aunque también se extrae del gas natural, captura el CO₂ y lo almacena, en vez de liberarlo a la atmósfera. Por último, encontramos el hidrógeno rosa, que utiliza electricidad de la energía nuclear, y el verde, donde la electrólisis procede de fuentes renovables.

RTVE El hidrógeno dorado: una fuente de energía natural bajo los Pirineos

Contaminación

Aunque el más común y económico es el gris, la tendencia actual intenta migrar hacia el verde, el menos contaminante, pero también mucho más caro y poco apto para industrias pesadas. Por tanto, su uso no se plantea como una solución definitiva a la descarbonización

Sin embargo, recientemente se ha confirmado la existencia de otra variedad aún más interesante y sostenible: el hidrógeno dorado, surgido de forma natural ante la interacción de ciertos minerales ricos en hierro con el agua. Se encuentra de forma natural en el subsuelo, por lo que no requiere una producción mediante gas o electrólisis. Además, es más limpio que la variedad azul, mucho más económica que la verde y es un recurso real y existente, que no exige un proceso productivo como otras industrias.

Son un reactor natural que está generando hidrógeno continuamente

El geólogo Jordi Tritlla es uno de los máximos expertos del tema en España. ‘El Cazador de Cerebros’ conversa con él en el Estanque de Lers, en el Pirineo francés, a unos 50 km bajo tierra, en el subsuelo, donde se ubica una de estas fuentes naturales, “son un reactor natural que está generando hidrógeno continuamente”.

Una gran reserva de hidrógeno

Una de las características más interesantes de esta energía es que se ha descubierto relativamente hace poco que hay emanaciones en distintos puntos del planeta, así que podría ser una excelente reserva que satisfaga una parte de la demanda energética. Y, “como aparece en zonas en las que nunca se ha explorado por hidrocarburos porque no tiene por qué haberlos, se abre la posibilidad de que existan zonas que estén altamente pobladas y que necesiten esta fuente de hidrógeno”, remarca Tritlla.

Así, es necesario comprender mejor la cinética de este proceso, es decir, la velocidad de reacción de la producción de esta energía, para después poder acelerarla y aumentar su generación. Como apunta este experto, “una de las aproximaciones, que es una belleza, es que una de las posibles formas de incentivar la producción de hidrógeno sea inyectando CO₂ atmosférico, o sea, capturando CO₂ y produciendo hidrógeno a la vez. No sería un sistema neutro, sino negativo”.

Aunque falta aún mucha investigación sobre este tema, es interesante saber que existe este recurso natural y continuar estudiándolo, para saber cómo puede aprovecharse su potencial al máximo para hacer frente a la descarbonización