Ella es Lari Ondo, la mujer que fue esencial para el matrimonio de Fernando Guillén y Gemma Cuervo
- Los hijos de Fernando Guillén y Gemma Cuervo recuerdan a esta mujer esencial en sus vidas
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La de los hermanos Guillén Cuervo no fue una infancia 'normal', al menos como la de la mayoría de los niños españoles de su generación. Sus padres compaginaban hasta 14 pases de teatro semanales con las grabaciones en los Estudios 1 de Televisión Española, con apenas la hora libre de la comida para ver a sus hijos. Natalia, Fernando y Cayetana Guillén Cuervo recuerdan su infancia haciendo los deberes en los camerinos, pasando las tardes entre las bambalinas del María Guerrero y no olvidan que estuvieron más de siete años seguidos sin celebrar la Navidad en casa.
"Pasábamos las Navidades en Valencia porque había función, o en Barcelona porque había función, o en Zaragoza porque estaban allí trabajando. O veranos que teníamos que pasar a lo mejor con familiares…", dice Fernando. La Nochevieja y la celebración del Año Nuevo se hacían coincidir con los descansos entre actos del teatro: experiencias fundamentales que marcaron su juventud e impulsaron que dos de ellos, Fernando y Cayetana terminaran por seguir el camino iniciado por sus padres.
Lari Ondo, una figura fundamental
Además, en la infancia de estos niños aparece una figura fundamental: Lari Ondo. Con tan solo 19 años, esta joven entra en su casa y forma de inmediato parte de sus vidas. Así lo recuerda ella misma: "Yo estoy con ellos desde el año 69, porque tenía a mi hermana justo viviendo en el edificio de al lado y me avisó: 'Mira, Lari, que hay una señora que quiere una babysitter para tres niños, y son Gemma Cuervo y Fernando Guillén'. Y yo dije '¡Qué maravilla! ¡Sí!'".
Lari cuida de los niños tras el nacimiento de Cayetana y estará unida a la familia durante los ocho años siguientes. Han pasado más de cinco décadas y los hermanos la recuerdan así: "Fue lo mejor del mundo. Era un pilar muy importante. Yo creo que para mi madre fue la salvación, la verdad", explica Natalia Guillén Cuervo. "Lari es como… No te puedo decir como una segunda madre, porque eso no existe, pero sí es una persona que cuidó de nosotros muchos años", añade Fernando.
Intento evitar el drama
Como una mujer que dejaba atrás la adolescencia para entrar en la edad adulta, y consciente del estilo de vida del matrimonio para el que trabajaba, Lari intentó que los hijos de la pareja no siguieran los pasos de sus padres: "Yo quería evitar que fueran actores para que no pasaran por todo eso: por tener que dejar a los hijos con otras personas. Se iban dos y tres meses seguidos, y se quedaban llorando muchas veces. Gemma lloraba muchas veces. Los niños lloraban: '¿¡Mamá, te tienes que ir otra vez!?'. ¡Era un drama!".
Lari Ondo recuerda, además, los 'malabares' del matrimonio para asistir a las celebraciones especiales en la vida de sus hijos: "Hubo una comunión de uno de los niños, que fueron a misa y luego se fueron a Barajas. ¿A qué iban a Barajas? A comer con los niños y dos tíos mayores que vivían en Aluche. ¡No tenían tiempo más que para comer y coger un avión para irse a Barcelona!".