¿Cómo nos puede ayudar la filosofía con nuestros problemas?
- ¿Qué tiene que ver la vida con la filosofía?
- ¿Podemos cambiar nuestro destino?
Tanto Las mañanas de RNE como Mamen Asencio adoran el conocimiento pero también buscan entender la pluralidad de opiniones y hay algo en nuestra historia que ha tratado ambos temas: la filosofía.
"El que sabe que no sabe" es la nueva sección del programa en la que contaremos con el profesor y filósofo Eduardo Infante para intentar entender un poco mejor el mundo que nos rodea. Apoyados siempre en la filosofía pero tratando temas cotidianos que todos sufrimos.
¿Qué tiene que ver la vida con la filosofía?
Eduardo nos cuenta que la filosofía nació como el arte de preguntar. "Nos enseña, efectivamente, a derribar los muros mentales y toda esa basura que tenemos en la cabeza, a derribar dogmas y prejuicios con esas preguntas", explica el profesor sobre su origen.
Pero la filosofía, como casi todo en la vida, también evoluciona. "Termina siendo termina siendo un arte de vivir. Afirmaba, por ejemplo, Martin Heidegger que la mayoría de los hombres vivimos existencias anónimas, es decir, que viven en el se dice y en el se hace. Es decir, que dicen lo que dicen porque es lo que todo el mundo dice y hacen lo que hacen pues porque es lo que todo el mundo hace. Y frente a eso, el filósofo se atreve a construir una existencia auténtica, precisamente conscientes de que el tiempo se nos escapa".
Eduardo nos habla de que la filosofía está muy viva en el presente así que lo ponemos a prueba con testimonios reales.
Roberto: un camarero en paro por la precariedad laboral hostelera
Roberto se ha dedicado a la hostelería durante más de una década. "Estamos hablando de jornadas laborales de más de 60 y 70 horas semanales. Sueldos que no superan los 1.200 €, festivos que básicamente no se cobran o vacaciones que a veces son de 15 días anuales. Y sinceramente, yo ahora mismo estoy en paro porque he descartado un contrato indefinido, que me han ofrecido después de un año de trabajo, porque las condiciones eran estaba echando 70 horas semanales y un único día de descanso a la semana", explica su situación el hostelero.
Para la filosofía es importante conocer y entender el problema desde unos puntos característicos. Eduardo lanza una pregunta a Roberto: "Tú problema, ¿es individual o colectivo?". Si es individual depende exclusivamente de ti, sino significa que hay más gente afectada que puede ayudarte en la búsqueda de esa solución.
El profesor también nos recomienda una lectura de Jean-Paul Sartre. «En ese texto, curiosamente, este filósofo existencialista está mirando al camarero y está diciendo: "este camarero puede dejar de ser camarero en cualquier momento, puede dejar su su su bandeja encima de la mesa, quitarse su mandil, salir por la puerta y ser otra cosa"», explica sobre una habilidad exclusivamente humana ya que "un árbol no puede dejar de ser un árbol ni un león puede dejar de ser un león".
Karl Marx contestaría a Sartre algo como: "Es muy fácil decirlo. Pero claro, cuando pase por esa puerta será un camarero, un paro". Eduardo nos explica que las condiciones materiales en las que hemos nacido han sido las culpables de nuestra forma de vivir: "Nacemos ya peones o nacemos reina en una partida de ajedrez".
Ana: camionera y autónoma preocupada por su economía laboral
Ana es camionera y cuenta con un trabajador. Su facturación mensual, con 4 viajes diarios, puede ser de unos 7.200€ al mes. De esa cantidad, se debe descontar el gasoil, el sueldo del camionero con sus impuestos, el 21% a final de mes, el desgaste de ruedas, la letra del camión y un largo etcétera.
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La relación de Eduardo entre el testimonio de Ana y la filosofía está clara, la justicia. "Fue definida muchísimos siglos como: darle a cada uno lo que se merece. Pero aquí viene el problema,¿ qué es lo que merece cada uno?", explica.
Otro punto de vista del que habla el filósofo es la justicia distributiva: "¿Qué es lo justo que se debería llevar el camionero? Porque claro, el camionero está haciendo un servicio pero lo está haciendo sobre una carretera que no es suya".
En este caso debemos intentar identificar algo que es realmente complicado como el bien común. Uno de los problemas humanos es que, a menudo, confundimos la justicia con lo que no conviene. Además, nuestra percepción de la justicia cambia, notoriamente, dependiendo de las condiciones materiales en las que hemos nacido. "El gran problema filosófico es encontrar lo justo para todos y el bien común".
Otra de las preguntas que debemos contestas esta temporada en Las mañanas de RNE es: ¿podemos cambiar nuestro destino?