'As Bestas': claves e historia real de la película que arrasó en los Goya y que llega a RTVE Play
- Denis Ménochet, Marina Foïs y Luis Zahera protagonizan este brillante thriller rural
- As bestas, ganadora de 9 premios Goya, ya disponible en RTVE Play
Cruda y visceral, los primeros minutos de As bestas son toda una declaración de intenciones. Una secuencia a cámara lenta de una rapa das bestas, la corte de crines de los caballos salvajes -muy numerosos en Galicia- que muestra algo latente a lo largo de toda la película: ¿es posible domesticar a la naturaleza?¿a quién pertenece? El director, Rodrigo Sorogoyen, escribió el guion mano a mano junto a Isabel Peña, pero la idea partió de ella, tras leer una noticia en el periódico sobre dos holandeses que se mudaron al norte de España para emprender una nueva vida. Un sueño que pronto se vería truncado.
Algunas partes de la historia están fielmente basadas en los hechos reales, pero también hay espacio para la ficción. As Bestas es un drama rural, con tintes de thriller que nos sitúa en una pequeña aldea de la Galicia profunda, aunque el rodaje tuvo lugar en el Bierzo leonés. Marina Foïs y Denis Ménochet dan vida a una pareja de franceses que intenta sacar adelante un huerto ecológico. En el pueblo apenas hay unos pocos vecinos más. El trato es cordial, pero cuando una compañía energética lanza una oferta al pueblo por unos terrenos comunales, donde pretenden instalar unos molinos eólicos, la confrontación empieza a tensar las relaciones.
El crimen de Santaolalla: ¿Cuántas similitudes guarda con la película?
El guion de As bestas traza muchos elementos que recuerdan al conocido como "crimen de Santaolalla", un suceso que impactó en Galicia a principios del año 2010 en el que se inspiraron Sorogoyen y Peña. Tal y como narró la prensa nacional, un electricista holandés (en la película cambia la nacionalidad por franceses), llamado Martin Verfondern, nacido en Alemania que se mudó junto a su mujer, Margo Pool a la aldea gallega de Santoalla, en Petín (Ourense) en el año 1997 para emprender un nuevo negocio agrícola. Su presencia en el pueblo no fue un problema, al menos, al principio. El pueblo estaba comenzando a recobrar la vida de antaño, gracias a la recuperación patrimonial y natural que emprendieron Margo y Martin y la llegada de algunos voluntarios de todo el mundo que acudían a la granja de los alemanes.
Tras diez años de convivencia, el 19 de enero de 2010, la noticia sobre la desaparición de Martin Verfondern conmocionó a todos. Tras semanas de búsqueda, los investigadores paralizaron el operativo. No había rastro de Martin. Al igual que ocurre en la película, también llegó al pueblo una enorme compañía energética que ofreció una gran suma de dinero a cambio de que les vendiesen unos terrenos. La idea era instalar 25 molinos eólicos. La negativa de Martin le enemistó con varios, especialmente con los hermanos Juan Carlos y Manuel Rodríguez, a los que dan vida en la película Diego Anido y Luis Zahera, de la que comenzó a recibir amenazas.
¿Qué pasó con Martin Verfondern?
Durante varios años, Verfordern vivió enfrentamientos de todo tipo con los hermanos Rodríguez, incluso agresiones físicas. Instaló cámaras de vigilancia en casa y les denunció en innumerables ocasiones a la Guardia Civil. "Éste es también mi pueblo", afirma Verfondern, "Y yo que soy de Amnistía Internacional no me voy a marchar por un mini Sadam", aseguró a El País el propio Verforden a principios de septiembre del año 2009. Ese mismo año, Verforderm estaba totalmente convencido de que su vida corría peligro de muerte.
Cuatro años después de su desaparición, en 2014, su mujer Margo recibió nuevas noticias de la Guardia Civil, un helicóptero había logrado dar con el enorme Chevrolet blanco que el holandés solía conducir. El coche estaba completamente calcinado. ¿Qué encontraron dentro?¿quién había sido? Su historia está relatada en As bestas, una película de Rodrigo Sorogoyen que ahora aterriza en RTVE Play.
Mirada técnica: Un western clásico
La cinematografía de Sorogoyen está asociada al thriller, planos y secuencias de acción trepidantes y grandes angulares. Aquí, sin embargo la apuesta es otra: más planos fijos, menos movimientos de cámara, y más montaje dentro de cada secuencia. De hecho, no usan ningún angular. El objetivo era lograr el aspecto de una película clásica, un western rural, en el que predominaba la inmensidad de la naturaleza. Ahí está, por ejemplo, esa primera secuencia en cámara lenta que, ya desde los primeros minutos, atrapa al espectador hacía las profundidades de la historia. Una exploración de la condición humana, un aspecto que sí se repite en parte de la filmografía del cineasta.
El éxito arrollador de As bestas
Aclamada por crítica y público, desde su estreno As bestas, de Rodrigo Sorogoyen, se convirtió en uno de los grandes fenómenos cinematográficos del cine español. Venía avalada por el Premio del Público al Mejor film europeo que ganó en el Festival de San Sebastián, el primero de una enorme lista de galardones y reconocimientos. El César al Mejor film extranjero, otorgado por la Academia francesa en su edición número 48 le allanó el camino hasta la gala de los Goya, en la que la película de Sorogoyen y Peña se hizo con nueve premios, entre ellos el de Mejor película, dirección y los dos Goyas a Mejor actor, para Menonchet y a Mejor actor de reparto para Luis Zahera. En total, recibió 17 nominaciones. También se llevó el máximo galardón en los Forqué y Feroz y el de Mejor película en el 35º Festival Internacional de Tokyo 2022.