Paloma Sánchez-Garnica celebra su 'Victoria' en el premio Planeta
- La escritora madrileña se alza con el galardón gracias a una historia bélica
- ¿Qué experiencia unen a la ganadora y a la finalista de la 73º edición?
¿Os imagináis ganar un premio Planeta y su correspondiente millón de euros? ¿De qué hablaría vuestro discurso? ¿Cómo te llevarías con el otro finalista? En Las mañanas de RNE no tenemos esas respuestas pero la ganadora del premio Planeta 2024 sí que las tiene.
Paloma Sánchez-Garnica se alzó la pasada noche con el galardón y con el millón de euros correspondiente por su novela Victoria. La celebración tuvo lugar en el museo nacional de arte de Cataluña, con la presencia de los reyes, donde la noche se alargó pero, como dice Paloma, "es una vivencia que hay que disfrutar".
Mamen Asencio charla con la ganadora pero también con la otra finalista, Beatriz Serrano, gracias a Fuego en la garganta. Su obra habla de la historia de una joven con "poderes sobrenaturales" y de cómo avanza en la vida tras el abandono que sufrió por parte de su madre cuando era una niña. Ambas finalistas no cuentan cómo fue la noche y la grata experiencia de ser protagonista en un evento de esa magnitud. No fue la primera experiencia de este tipo para las dos, Paloma también fue finalista en 2021 con Últimos días en Berlín pero el premio fue para Carmen Mola.
¿De qué va Victoria?
Se trata de una historia bélica que narra la historia de cómo una mujer se vio envuelta en una trama de espionaje cuando trata de salir adelante en el Berlín derrotado en la Segunda Guerra Mundial. Dicha mujer se ganaba la vida con la voz e iba cantando por distintos escenarios pero tuvo que cambiar de profesión a la fuerza: "Ella ejerce por necesidad, por pura necesidad, de locutora de radio. Cuando se produce el bloqueo de Berlín en el 48, tiene que ejercer porque tiene una buena voz".
Victoria reflexiona sobre la importancia del periodismo en las sociedades pero, sobre todo, es una historia de amor que habla de la naturaleza de un sentimiento tan puro capaz de nacer y crecer bajo cualquier circunstancia.
A Sánchez-Garnica le llegó la inspiración para este libro cuando aún estaba en la fase de documentación de Últimos días en Berlín, el libro con el que fue finalista del mismo premio que hoy celebra. El destino, suponemos.
No siempre se puede ganar el premio pero sí una amistad
Bien lo saben nuestras dos invitadas. Paloma habla desde su victoria, nunca mejor dicho, pero afirma que disfrutó muchísimo de la experiencia también cuando no ganó: "Fue una experiencia extraordinaria pero yo creo que esto es un punto más. Y estoy dispuesta a disfrutarla un punto más".
Beatriz Serrano agradece que esta experiencia haya sido al lado de Paloma y confiesa que la está ayudando mucho a sobrellevar este proceso: "Se está convirtiendo, un poco, en mi coach emocional desde esta mañana".
Paloma es la voz de la experiencia y está siendo una pieza importante en estos momentos para Beatriz, además, ambas coinciden: "Podemos hacer un buen tándem".
Discursos para la defensa periodística y transgresores
Sánchez-Garnica explica que cuando ya estás entre los 10 finalistas y puedes ser el ganador, debes intentar tener algo preparado a modo de discurso. En el que ella dio ayer, trató de defender la figura del periodista: "Sois fundamentales para contar y para informar, pero también tenemos el derecho los ciudadanos de que haya una libertad de prensa". También explica que la sociedad tiene el deber de "cribar y analizar" la información que recibe para poder formar una opinión propia.
Serrano, por su parte, cree que explicó un poco mal su obra: "Estaba muy nerviosa. Llámalo nervios o llámalo tener a los reyes de España delante". El discurso generó cierto rumor al juntar las palabras "infanticidio" y "milagro". "La protagonista, Blanca, tiene una especie de don que sus amigas de internet lo llaman milagros. Pero uno de los milagros es que mata a una niña de su clase, bueno, le desea la muerte tan fuerte que esa niña termina muriendo", explica Beatriz sobre el malentendido que creó cierto silencio entre el público.
Paloma califica, entre risas, como "transgresor" el discurso de su rival. Mientras Beatriz trata de explicar que es un reflejo de la inocencia y frescura de las nuevas voces de la literatura, como es su caso, y "llevar un poco todo por este camino de la improvisación".
Tanto Victoria como Fuego en la garganta llegarán a las librerías en el mes de noviembre, mientras tanto, podemos hacer tiempo con otras obras suyas como Últimos días en Berlín o El descontento.