'Machuca', la conmovedora obra maestra del cine chileno que llega a RTVE Play
- Se cumplen 20 años de esta película que emocionó a Chile
- Alegato de la amistad por encima de clases sociales: Machuca, ya en RTVE Play
Hace dos décacas el cine chileno estrenó Machuca, una de las películas más populares y aclamadas de su historia. Dirigida por Andrés Wood, la cinta está basada en la novela Historia de un verdadero Machuca, escrita por el poeta Eledín Parraguez. La historia arranca en la ciudad de Santiago de Chile, unos años antes del golpe de estado de Pinochet. Un periódo en el que aún era posible la amistad entre dos niños de clases sociales distintas, como ocurre con sus protagonistas, Gonzalo Infante y Pedro Machuca, consecuencia de la integración educativa impuesta por el entonces presidente, Salvador Allende.
Infante, proviene de un barrio acomodado, Machuca de un humilde poblado ilegal recientemente instalado a pocas manzanas de distancia. Las vidas de ambos se cruzan cuando un colegio religioso pone en funcionamiento un programa de integración social. Machuca habla de los mundos separados por una gran muralla invisible que algunos, en su afán por hacer realidad los sueños de una época llena de esperanzas revolucionarias, quieren derribar.
La amistad por delante, de fondo la historia
Machuca es una película social, pero ese trasfondo -el de una dictadura en ciernes y la perdida de los derechos sociales que conllevó- va llenado de soslayo, mientras el espectado posa su mirada en algo más luminoso, la amistad de sus protagonistas y su mirada inocente del mundo. El director va dejando pinceladas de la realidad que les rodea de forma natural, son detalles que describen la situación que está por llegar en Chile, a principios de los 70. Se ven algunas pintadas en paredes, anuncios de periódico, carteles en comercios donde se puede leer que ya no hay carne, huevos, ni harina.
Contra el estigma de la pobreza
Gonzalo y Pedro aceptan naturalmente las diferencias de cada uno. Se perciben más pacifistas que los adultos. Es entendible entonces que ellos no conozcan la palabra “prejuicio” y poco entienden el nivel de violencia en su país. Como ocurre con otras grandes historias, como La vida es bella, el acierto en Machuca es posar la mirada de la cámara en los ojos de los niños, es decir, bajo la perspectiva de la inocencia, para reflejar en las imágenes una visión dura del régimen opresor.
Alegato a la educación libre
De fondo también está presente el alegato a la educación como vía de libertad, como herramienta fundamental para romper las desigualdades. Machuca pone de relieve que aquella educación integradora, previa a la dictadura chilena, rompió el círculo de la pobreza, no sólo la pobreza material, sino también la pobreza de oportunidades.
Dos debutantes, ¿qué fue de los niños?
Los niños, de 12 y 13 años, Matías Quer y Ariel Mateluna dieron vida a Infante y Machuca, respectivamente. Para ambos aquel fue su debut en la gran pantalla y la primera vez que interpretaban un papel, pero solo uno de ellos continuó en el mundo del cine. A Quer nunca le interesó la exposición y la fama que generó la película, un auténtico fenómeno en Chile. Sin embargo, para Mateluna, hacer esta película supuso enamorarse de la actuación, contaba que fue una revelación y una especie de terapia.
Mateluna se formó como actor, siguió trabajando en el cine y la televisión. Es un rostro habitual de series de sy país y recientemente le hemos podido ver en la película de producción hipanochilena, La contadora de películas, con Antonio de la Torre; o en La Verónica, una interesante propuesta del cine independiente chileno. También en la película Neruda, disponible en RTVE Play. Aunque su gran papel fue Machuca, y ya puedes disfrutarla en la plataforma.