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Moda sostenible, la mejor alternativa para vestir con prendas responsables con el medio ambiente

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Curioseando - El impacto de la producción de pantalones vaqueros

La forma en que nos vestimos es una manera en la que muchos proyectan su identidad, personalidad e, incluso, estado de ánimo. Las tendencias que marcan las pasarelas internacionales o las redes sociales y celebrities pueden surgir y desaparecer en cuestión de meses o, incluso, semanas. Los consumidores llenan sus armarios de prendas sin ser conscientes del impacto que tienen en el medio ambiente. La industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo, solo por detrás del sector energético. Es el coste ambiental de estar a la moda.

Pero una nueva tendencia ha irrumpido en la industria textil: la moda sostenible. Vestirse de la manera menos perjudicial para el planeta es posible y constituye una de las medidas clave para combatir el cambio climático. 'Curioseando', el programa de divulgación científica de La 2, descubre algunos avances prometedores para reducir las emisiones en la producción, venta y desecho de las prendas.

Vísteme despacio, que el planeta tiene prisa

Las cifras hablan por sí solas. La industria tradicional de la moda es la responsable de cerca de un 10% de las emisiones mundiales de dióxido de carbono, lo que repercute en el calentamiento global del planeta, uno de los efectos colaterales y más perjudiciales que favorecen el cambio climático a una velocidad e intensidad cada vez más considerable. Como indica el experto en moda sostenible Fernando Cardona en ‘Curioseando’, “la industria textil tiene un gran impacto en el calentamiento global y es una de las que más gases de efecto invernadero genera a escala mundial”. El uso y la aceleración de los sistemas industriales para la fabricación de textiles no solo se reduce al ámbito de la moda, sino también a otros sectores como el hogar, sanitario, laboral… Actuar para frenar este efecto medioambiental resulta esencial.

La problemática de la moda fast fashion

Tal y como explica Cardona, “en la mayoría de procesos textiles convencionales se utilizan maquinarias grandes que requieren mucha energía. Además, se usa un gran volumen de productos químicos contaminantes que suponen no solo un serio riesgo para el medio ambiente, sino también para la salud de las personas”. Este sistema de producción industrial se enmarca dentro de lo que se denomina fast fashion –algo así como la ‘comida rápida’ del sector moda–.

Lo cierto es que la fabricación de un simple pantalón vaquero se convierte en una acción nefasta para el planeta. Para hacernos una idea, en todo este proceso se libera más de una decena de kilogramos de dióxido de carbono y se consumen, además, cerca de 2.000 litros de agua solo para la fase de teñido. Por no hablar de los varios litros de químicos que se emplean en el proceso de acabado. En el último escalón de este dañino sistema, el de secado, se vuelve a utilizar una cantidad ingente de agua: aproximadamente unos 1.000 litros.

El experto en moda sostenible Fernando Cardona con Marc Santandreu en 'Curioseando'

El experto en moda sostenible Fernando Cardona y Marc Santandreu en un taller de producción de pantalones tejanos

La solución más sostenible

‘Curioseando’ descubre cómo se puede minimizar la huella de la fabricación textil en el medio ambiente. El primer paso para cuidar nuestro planeta sin renunciar al estilo ni a la elegancia es aplicar la moda sostenible o slow fashion. Se trata de fomentar un consumo moderado y consciente, dejando de lado el consumo compulsivo que resulta tan dañino y contaminante. Se basa en un sistema alternativo de producción con técnicas innovadoras y sorprendentes, con tejidos naturales y maquinaria de última generación, que requieren un consumo de energía menor.

Un ejemplo de innovación en la producción de jeans es el sustituir la piedra pómez –usada durante décadas para el mítico lavado a la piedra de los tejanos– por nanoburbujas, o lo que es lo mismo: partículas de gas diminutas que consiguen teñir la prenda con la cantidad justa de químicos y el mínimo consumo de agua. A ello se unen los nuevos sistemas y lugares responsables de desecho de las prendas, la mejor alternativa a los ya arcaicos vertederos donde, entre otros enseres, las prendas y tejidos textiles se apilan, desprendiendo durante el proceso de quemado gases con un elevado índice de toxicidad.

¿Quieres saber más para vestir a la última respetando el planeta? No te pierdas ‘Curioseando’, cada martes a las 23.45 horas en La 2. También tienes disponibles todos los capítulos en RTVE Play.