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La Moderna

Un té con Begoña Maestre: "Hacer de Lázara ha sido muy divertido"

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Un té con Begoña Maestre

Con toda la pena de nuestro corazón, esta semana, en La Moderna, hemos despedido a Begoña Maestre. Una actriz con un talento infinito, que nos hizo odiar a doña Lázara desde el primer momento que pisó el salón de té, y que demostró que tras las cámaras era una persona mucho más cercana a la personalidad de su enemiga Teresa, que a la de su personaje. Begoña es una mujer alegre, cuidadosa, con una gran disciplina y dispuesta a ayudar a todo el equipo. Poco tiene que ver con Lázara, el personaje que ha interpretado un año en La Moderna y del que nos habla en profundidad tras su marcha.

¿Qué hay detrás de Lázara?

Lázara es egocéntrica, orgullosa, poco empática, ambiciosa, le gusta el poder, el dinero, es una narcisista de libro, una gran trabajadora, pero muy mala compañera”, dice Begoña sobre Lázara cuando le pedimos que la defina. Ella misma reconoce inmediatamente que comparten el mismo cuerpo, pero espera que en poco más.

Quizás fue eso lo que le atrajo de su personaje, la enorme diferencia que había entre ambas. “Me encanta porque en sus zapatos puedo hacer y decir cosas que no se me ocurrirían jamás”, reconoce entre risas. “Me resulta divertido sacar otra parte de mí, otra parte a explorar”, cuenta en la entrevista.

Begoña sabe que a Lázara se la puede considerar que es mala, pero ella intenta trabajar sin caer en el prejuicio del personaje. “Quiero intentar ser fiel a sus objetivos. Ella no le hace daño a Teresa por placer, ella sigue su objetivo y simplemente, si Teresa se pone en medio, se ve afectada”, reconoce sobre el personaje de Lázara.

“No creo que Lázara sea capaz de amar, ni de sentir empatía o cariño. Lázara es una narcisista de manual y cuando estuve investigando sobre el personaje, busqué sobre los narcisistas y la respuesta era clara: no pueden sentir cariño”, cuenta Begoña sobre la esposa de don Fermín. Sí que reconoce que puede sentir admiración por un personaje que considere su igual, y en este caso no tiene dudas de que si alguien ha podido estar a su altura es Emiliano.

¿Qué hay de Begoña?

Begoña se siente muy feliz por ver como los seguidores de la serie aborrecen a Lázara. “Eso significa que estamos haciendo un buen trabajo”, ha reconocido orgullosa por el papel que ha hecho en la serie.

La actriz también ha hablado de la historia que le habría gustado contar en La Moderna dentro de unos años. “Me gustaría que volviera con la Guerra Civil y que fuera una fascista de libro, que se hiciera con La Moderna sin tener que fingir delante de Fermín ni de nadie”, cuenta ilusionada con la idea. Begoña siente que habría sido muy divertido verla en ese papel.

“Con Lázara he aprendido a que no me importe tanto lo que piensen de mí. A ella le da exactamente igual y te voy a decir que es muy liberador”, explica Begoña sobre lo que se lleva de este periodo interpretando a Lázara. “También he aprendido muchas cosas que no quiero ser ni quiero hacer”, reconoce también sobre ese lado oscuro de Lázara.

Begoña ha disfrutado mucho en este papel, “desde fuera puede parecer lo contrario, pero me divierto mucho con Lázara”. Interpretar a alguien tan complejo y opuesto a ella como Lázara le ha hecho disfrutar cada día de rodaje como a una niña pequeña y eso es algo que se lleva de este periodo que describe con tanto cariño.