Marcelina reconoce a Quico como el Encapuchado

• Quico ataca a Marcelina en la corrala
• La camarera le descubre y revela su identidad a Leonora

Marcelina reconoce a Quico como el Encapuchado

Quico había dispuesto todo para huir de Madrid antes de ser descubierto, pero la fijación que sentía por Marcelina ha terminado siendo su ruina. El sobrino de Cañete ha demostrado tener una especial obsesión por la amiga de Trini desde que comenzó a trabajar en La Moderna. Su mala relación con las mujeres llegó a su punto culmen cuando Marcelina se convirtió en la primera mujer camarera, un puesto que hasta ahora había estado destinado solo a los hombres. Desde ese momento, Quico demostró una y otra vez el desprecio que sentía por Marcelina sin ningún reparo.

Marcelina intentó limar asperezas

Desde el primer instante en el que Marcelina pisó el salón de té, Quico se dedicó a sabotearla en el trabajo. No quería que una mujer le ayudase o que, de alguna forma, hiciese mejor su trabajo que él. Por eso, intentó ponerle la zancadilla una y otra vez, y no en el sentido figurado de la expresión. Sin embargo, Marcelina, que tiene un buen corazón, lejos de querer denunciarle ante don Fermín, quiso limar asperezas con el sobrino de Cañete e incluso le hizo un regalo. La camarera le regaló a Quico una caja de betún para limpiar sus zapatos, ya que se había fijado en que él se tomaba muchas molestias por ir siempre pulcro, especialmente con esta prenda. Pero, al contrario de lo que ella pensó, Quico se lo tomó como un agravante y llegó incluso a empujarla en medio del salón.

El Encapuchado de la Puerta del Sol

Hace tiempo que sabemos que Quico es el Encapuchado de la Puerta del Sol, el hombre que ataca a mujeres indefensas provocándoles algo más que un buen susto con visita al hospital incluida. Con su imagen de niño bueno recién llegado del pueblo, nadie sospecharía de él, y menos siendo el sobrino de Cañete, el ejemplo perfecto de hombre educado, comprometido y feminista, pero lo cierto es que Quico ha sido el culpable de que tres mujeres hayan sufrido una paliza.

Descubrimos que Quico era el Encapuchado cuando en capitán Dávila anunció delante de él y de Cañete que el psicópata que atacaba a las mujeres no las robaba, solo se llevaba un pequeño objeto que representaba un trofeo de su ataque, las gargantillas de todas esas mujeres. Por eso, no era de extrañar que, en cuanto Quico vio a Marcelina llevando una, pensase en atacarla con la manía y obsesión que tiene con ella.

Quico es el Encapuchado de la Puerta del Sol

Quico ataca a Marcelina y ella le descubre

Quico ha atacado a Marcelina en la corrala. Ha estado varios días pendiente de sus movimientos, y tras varios intentos en los que a Marcelina le ha salvado encontrarse con Leonora o la compañía de Cañete, Quico se ha decidido a atacarla. El único problema es que, en medio del forcejeo, Marcelina ha reconocido los zapatos siempre limpios de Quico y le ha acusado de ser el Encapuchado de la Puerta del Sol. Así se ha descubierto en la corrala que el sobrino de Cañete era el hombre que atacaba a las mujeres del centro de Madrid.

Quico ha conseguido huir antes de que saliesen los vecinos alertados por los gritos de Marcelina, pero ella también ha conseguido revelar su descubrimiento antes de caer al suelo sufriendo un desmayo. Ahora todos en La Moderna saben quién es el Encapuchado, el problema es que ha huido y nadie sabe dónde se esconde. Cañete y compañía tendrán que estar atentos los próximos días para poder detener a Quico.

Quico ataca a Marcelina