Adela nos cuenta en el Blog las experiencias vividas en su primer viaje con 'Españoles en el Mundo'.
Saltamos del avión el último día de rodaje, no había pensado mucho en ello durante los días anteriores pero en cuanto te sientas en la puerta abierta del avión y ves tus piececitos colgando en el vacío...
Victor Wolkowicz se marchó de Barcelona buscando clientes y nuevos mercados para las enormes joyas que diseñaba. Los encontró en Mónaco, donde tiene instalado su negocio. Después de 15 años y multitud de experiencias, está totalmente mimetizado con el entorno y se mueve entre ricos y famosos, descapotables y yates, como pez en el agua.
Con apenas 24 años, Estibalitz Fonteciella lleva en la Costa Azul desde el 2007. Buscaba nuevas experiencias y mejorar su francés, pero consiguió un trabajo en el que combina los cuatro idiomas que habla. Trabaja en una empresa de asistencia en tierra a vuelos privados. Ha visto muchso aviones pero nunca ha saltado desde uno. Con nosotros da su primer salto al vacío
Carmen García Comas consiguió una beca europea para desarrollar su tesis en el idílico laboratorio de Ville Franche Sur Mer, junto a Niza. Estudia la talla de los copépodos, unos crustáceos de tamaño muy pequeño, para relacionarlos con el cambio climático. Le acompañamos a pescar plancton y nos muestra algunas de las bellezas de la preciosa Niza.
Esta arquitecta de Pamplona llegó por primera vez a Francia para estudiar la carrera. Volvió a España pero las oportunidades laborales y la calidad de vida no eran las mismas que en la Costa Azul. Así que volvió a cruzar de nuevo la frontera. Le visitamos durante el Festival de Cine y nos enseña las dos caras de la ciudad: la de la farándula y la auténtica.
Esta supermujer de Bilbao tenía que ser. Tras 4 años en Niza ha creado su propia empresa de asesoramiento y capital riesgo. Además dirige un grupo de inversores y pequeñas empresas y, cuando no trabaja, recorre la Costa Azulen busca de aventura. Después de enseñarnos el Bussiness Resort en el que trabaja le seguimos a duras penas durante la escalada por una vía ferrata.
Para sobrevivir en la Costa Azul con poco presupuesto hay que tener muchos recursos y Pablo Lamas se los sabe todos. Trabaja duro en una empresa de venta de cruceros y pide ayudas para llegar a fin de mes, lo que no le impide disfrutar de buenas fiestas en Niza o asistir al Premio de Fórmula 1 de Mónaco. Pero eso sí; todo a la española.