En visperas del décimo aniversario de la independencia de Sudán del Sur, analizamos los estragos causados por el conflicto y la violencia que ha marcada esos primeros años del nuevo estado africano. Lo hacemos con Ana Lucia Bueno, supervisora de los programas sanitarios del Comité Internacional de la Cruz Roja en Sudán del Sur, que nos atiende desde Yuba, la capital.
La califican como "La Reina del Pop Francés", aunque nosotros añadimos "Africano", porque Aya Nakamura, esta extraordinaria vocalista y compositora, que, aunque es , efectivamente, de nacionalidad francesa, nació en la localidad de Bamako, en Mali, el 10 de mayo de 1995, pero, eso sí, se crió desde pequeña en un humilde barrio de la periferia de París, la capital de Francia.
Y dicen que Aya Danioko, verdadero nombre de Aya, es descendiente directa de una familia de griots, o sea, aquellos narradores o trovadores de historias de tradición oral tan comunes en el oeste africano.
Tomó prestado el apellido artístico de Nakamura del personaje Hiro Nakamura, de una serie de ficción.
Y empezó en la música colgando grabaciones suyas en Internet, hasta que un avispado productor se fijó en su impresionante voz. Y poco a poco su popularidad ha ido creciendo, primero en el circuito africano parisino, luego en su tierra natal, hasta extenderse por toda África y a nivel internacional.
En 2019, Aya Nakamura consiguió que su larga duración, titulado 'Aya', se convirtiese en el tercer álbum más escuchado del mundo.
Este es su nuevo single para 2021, que se llama "Bobo", ya situado en primeras posiciones en muchas listas.Por eso es "La reina del pop francés africano ", Aya Nakamura.
Y a pesar de todo, aquí estoy de la guineana Asaari Bibang. Edit. (Bruguera Contemporánea). La historia de cómo una niña de Guinea llegó a España y se convirtió en actriz, monologuista, y ahora también en escritora.
La decisión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de reconocer como genocidio el exterminio de mas de un millón de armenios a manos del Imperio Otomano, durante la Primera guerra mundial, ha dado un impulso histórico a la reclamacion de este pueblo asentado en el Caúcaso y ha provocado la ira de Turquía. Poco despues, Alemania admitía otro genocidio, el que cometió en Namibia a principios del siglo XX.
Han sido dos gestos que hacen justicia al sufrimiento y la tragedia de dos pueblos, pero el siglo pasado está salpicado de matanzas y persecuciones de carácter genocida, cuyo reconocimiento se presenta casi imposible. Es un reportaje de Aurora Moreno.
El programa Learn Africa de la Fundación Mujeres por África, quiere fomentar la capacitación de las estudiantes universitarias africanas a través de becas ofrecidas por universidades españolas. Unas 200 estudiantes africanas de 34 países se han beneficiado ya de este programa. Hablamos con Eugénie Berthelot, Coordinadora del programa Learn Africa.
La homosexualidad está prohibida en el Islam y castigada en muchos países musulmanes. En Marruecos la pena es de hasta tres años de cárcel. Se habla de homosexualidad masculina porque la femenina ni se concibe. Las lesbianas en ese país son invisibles y no pueden plantearse vivir libremente su sexualidad. Un equipo de TVE ha hablado con una española que vive en Marruecos, aunque por miedo a represalias no ha querido mostrar su rostro ni su nombre.
Hace justo 30 años se abolía en Sudáfrica el Apartheid. Durante décadas la minoría blanca mantuvo segregada y sin derechos a la población negra mayoritaria. Nelson Mandela promocionó la reconciliación, pero Sudáfrica vive hoy momentos convulsos por la corrupción.
El cuerpo de María Hernández, la cooperante española asesinada el pasado jueves en Etiopía, será repatriado mañana. Fue víctima de un ataque en la región de Tigray, donde se libra desde hace ocho meses una guerra civil que ha dejado miles de muertos y cientos de miles de personas al borde de la hambruna. Ahora, el gobierno de Etiopía ha decretado un alto el fuego unilateral, un paso necesario para resolver el conflicto.
Foto:EFE
La danza contemporánea de Senegal ha llegado estos días hasta los Teatros del Canal con 'Ella Poema', una iniciativa de la coreógrafa y bailarina Aída Colmenero que lleva casi una década en marcha. La pieza que se ha podido ver, gracias al apoyo de Casa África, pertenece a 'Ella Poema Senegal' y lleva por título "2 de noviembre. El quitador de miedos".
Gran parte de la población de la costa senegalesa vive de la pesca. Las mujeres son tradicionalmente las encargadas de procesar artesanalmente el pescado. Objetivo Igualdad cuenta cómo la crisis del COVID-19 las ha golpeado con dureza, pero están dispuestas a tomar de nuevo el destino en sus manos y salir adelante
