Todo empezó porque un juez del Tribunal Supremo ordenó cerrar varias cuentas de la red social por difundir noticias falsas en perfiles vinculados a la extrema derecha. Elon Musk, propietario de X, se negó y entonces él fue incluido en la investigación. La tensión ha ido escalando con multas y resoluciones que Musk nunca ha cumplido. El magnate acusa al juez de actuar por motivos políticos.
Foto: EFE/Isaac Fontana