Los ataques israelíes siguen golpeando Gaza de forma dramática. Solo este domingo se contabilizan 15 muertos, que se suman a las decenas de fallecidos del sábado. Las autoridades palestinas aseguran que no hay medios para desenterrar a los atrapados entre los escombros.
Entre los fallecidos en las últimas horas hay miembros de ONG's y al menos un periodista. Ya son 191 los comunicadores muertos en esta guerra. La UNRWA, la agencia de la ONU para los palestinos, ha suspendido la entrada de ayuda en un punto clave a causa de los ataques.
Pero hay una novedad esperanzadora: una delegación de Hamás ha iniciado en El Cairo conversaciones para discutir un acuerdo de paz en Gaza. Mientras, en Líbano, el alto el fuego que entró en vigor la pasada semana ha permitido que miles de libaneses vuelvan a sus casas.No obstante, esa tregua sigue siendo frágil. Las dos partes se acusan de no respetarla y ha habido al menos tres muertos en nuevos ataques israelíes.
Además, Israel, aún no permite a los libaneses el acceso a decenas de localidades del sur del país.
Ilana Gritzewsky, secuestrada el 7 de octubre y liberada en noviembre de 2023, ha relatado en el Canal 24 Horas cómo vivió los 55 días que estuvo como rehén de Hamás. Ella fue capturada en el Kibutz Nir Oz junto a su novio, que sigue secuestrado en manos del grupo terrorista.
De origen mexicano, Gritzewsky ha explicado cómo fue el momento en el que la secuestraron y perdió de vista a su novio y en qué condiciones la retuvieron en distintas instalaciones, incluido en un hospital donde, junto con otros rehenes, eran utilizados como escudos humanos.
Hace un año entró en vigor la primera y única tregua en la Franja de Gaza, que tenía como fin liberar al máximo número de rehenes posible. Hoy, más de un año después, cerca de 100 personas siguen secuestradas.
La Corte Penal Internacional ha emitido una orden de detención internacional contra Netanyahu y su exministro de Defensa, Yoav Galant, por presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en Gaza. Se les acusa de utilizar el hambre como arma de guerra, de asesinatos, persecuciones y de la privación intencionada a la población de bienes necesarios para sobrevivir.
La orden también afecta al líder militar de Hamás, Mohamed Deif, que Israel dio por muerto el pasado julio. Desde La Haya le acusan de crímenes como asesinato, exterminio, tortura y violación. Emiten la orden al no confirmar si realmente está muerto y aseguran que seguirán investigándolo.