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Este viernes se cumple un mes desde que Francisco está ingresado en el hospital Gemelli de Roma. Aunque los últimos partes médicos hablan de una clara mejoría en su estado de salud, nadie sabe cuándo saldrá del hospital. Por este motivo, nos hemos preguntado: ¿quién toma las riendas del Vaticano cuando el papa no está en la Santa Sede? El derecho canónico no contempla una suplencia en la guía de la Iglesia Católica cuando un pontífice está hospitalizado. Aunque los dicasterios funcionan de manera autónoma, hay tareas específicas reservadas al Santo Padre. Por el momento, el papa Francisco sigue llevando sus funciones desde el hospital.

El papa Francisco continúa "estable" y su pronóstico ya no es reservado, aunque seguirá con la terapia médica farmacológica, según el último parte médico proporcionado por el Vaticano este lunes, que vuelve a traer buenas noticias sobre su estado de salud. Aunque los médicos aseguran que su salud no corre un "peligro inminente", debido a la "complejidad de su cuadro clínico" continuará unos días más en el hospital siendo tratado.

El papa ha pasado una "noche tranquila" y se encuentra reposando", según el último parte del Vaticano, después de asegurar el viernes que el cuadro clínico "sigue siendo complejo". El pontífice, de 88, cumple este sábado 23 días ingresado en el hospital Gemelli de Roma por una neumonía bilateral y problemas respiratorios donde ha continuado con sus actividades laborales, alternando la oración con el descanso. Foto: EFE/EPA/GIUSEPPE LAMI

El papa Francisco ha pasado "una noche tranquila" y ha descansado, según ha informado el Vaticano a primera hora de la mañana, después de que el sábado asegurara que su salud se había deteriorado y se encontraba en estado "crítico". La Santa Sede indicó entonces que el religioso, de 88 años, había necesitado oxígeno suplementario y transfusiones de sangre. Foto: EFE/EPA/GIUSEPPE LAMI

Situada al pie de los Alpes, en el noroeste del país, la capital del Piamonte conserva la elegancia de una época de esplendor. La capital de la Casa de Saboya lo fue también de todo el reino cuando Víctor Manuel II asumió la corona en 1861. Turín resultó clave en el proceso de unificación italiana; para entonces ya tenía nobles hechuras, cómodas calles jalonadas de 18 kilómetros de soportales, amplias plazas y refinadas construcciones. Sus palacios y castillos hoy forman parte de la lista del Patrimonio Mundial. Cuando la ciudad perdió relevancia política comenzó un vertiginoso despegue industrial y tecnológico, con la fábrica de Fiat como punta de lanza. En compañía de la arquitecta y diseñadora Teresa Sapey emprendemos un largo paseo que parte de su barrio, a la orilla del Po, en torno a la iglesia de la Gran Madre de Dios, y llega hasta el lejano Castello di Rivoli. Por el camino descubrimos símbolos turineses como la Mole Antonelliana y su museo del cine, el barroco palacio Carignano o el valiosísimo museo egipcio. Además, buscamos la enigmática Sábana Santa en una capilla del Palacio Real anexa a la catedral y visitamos otras residencias notables como el pabellón Stupinigi o la enorme Reggia di Venaria. Locales como el controlador aéreo Matteo Damian y la bailarina Michela Lanteri unen sus voces a las de los guías Lissette Piedra y Angelo de Leonardis. Retratamos monumentos como la basílica de Superga, encaramada en el monte que protagonizó el terrible accidente aéreo que mató a los futbolistas de Il Grande Torino en 1949, un trauma nacional que todavía se recuerda. Contamos también con las autoras de sendos blogs turísticos sobre la ciudad: María José Trujillo, de GuiaDeTurin.com, y Luisa Triviño, de VisitarTurin.com.