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Pocos secretos esconde el Dakar para Isidre Esteve. La carrera más dura del mundo le espera un año más. Y ya van 20. Acostumbrado a superar adversidades, en 2007 sufrió una lesión medular a causa de un accidente y cambió la moto por el coche. En ese momento se dio cuenta de que también tiene dislexia. El año pasado, la rotura del diferencial del coche les frenó 24 horas. Quedaron atrapados en las dunas y consiguieron llegar a meta entre lágrimas.

Una vida soldada al Dakar desde hace catorce años, con participaciones consecutivas y llegando a la meta en todas ellas, Laia Sanz volverá a subirse a un coche para intentar conquistar la categoría de dos ruedas motrices. "Empezar tranquilos e ir cogiendo sensaciones para ver hasta dónde nos deja llegar", afirma una Laia Sanz optimista con su décimo quinta partcipación consecutiva en busca de la nueva meta, sin renegar de la suerte aunque, afirma, "hay que trabajarla".

Nani Roma comparte sus impresiones sobre el que será su 28º Rally Dakar, a tan sólo 22 días del comienzo de la prueba. El piloto se subirá a un Ford Raptor que, en tan sólo un año, ha pasado del ordenador, en el proceso de diseño, a las pistas. "Espero ser competitivo", asegura el catalán, aunque afirma que "Ford corre para ganar". Precisamente, incide sobre la dificultad que implica ganar con un coche en su primer año aunque explica que "tener un compañero bueno te hace mejor siempre ", en referencia a Carlos Sainz.