En los últimos meses, la entrada de inmigrantes a Arizona desde México ha disminuido. "La gente sigue viniendo, pero puede ser un 10 % de lo que teníamos en febrero y muchos de ellos son deportados automáticamente sin que se escuchen sus peticiones de asilo", explica Tim, voluntario con los samaritanos de Tucson. ¿Qué ha cambiado en este tiempo? Nos lo explica María Carou, corresponsal de RNE en Washington, que ha viajado hasta Arizona, a la frontera con México, en medio de una campana electoral que tiene en la inmigración uno de sus principales argumentos.
Kamala Harris ha recaudado más de 1.000 millones de dólares desde que tomó el relevo a Joe Biden. Cuatro veces más que Donald Trump en el mismo periodo. El hombre más rico del mundo, Elon Musk, está del lado del republicano. En la lista de Harris aparece otro de los hombres más ricos del planeta, Mark Cuban, inversor y propietario de los Mavericks, de la NBA.
Foto: Elon Musk (Samuel Corum/Getty Images via AFP)
Huntington Beach era conocida como Surf City, pero últimamente se ha ganado otro apodo: la capital MAGA, por las siglas del populismo liderado por Trump. Se trata de una isla republicana en un mar demócrata, el estado de California. Este municipio de la costa oeste se ha convertido en un retrato a pequeña escala de la América dividida. En poco tiempo se han concentrado aquí casi todas las guerras culturales que se libran a nivel nacional en todo el país.
Los hispanos son casi un 15% de los ciudadanos con opción a voto en los Estados Unidos, constituyendo la minoría más amplia del país y pueden ser clave en Estados bisagra como Arizona, Nevada o Pennsylvania. Según las últimas encuestas del Pew Research Center, un 57% planean votar por Kamala Harris y un 39% por Donald Trump. Los candidatos son conscientes de la importancia de este sector poblacional y tienen sus propias estrategias de captación.
Donald Trump les corteja con su propia versión musical y explota el discurso del agravio, el de que los inmigrantes irregulares se quedan con el trabajo y con las ayudas que deberían ser para los que llevan aquí más años. Por la contra, el equipo de Kamala Harris emplea anuncios en español en los que prometen soluciones para los ciudadanos que llevan décadas en el país, que trabajan, que pagan sus impuestos, pero que viven y mueren en la ilegalidad.
Mientras que hay Estados que son puramente demócratas, como California, o que se inclinan hacia el Partido Republicano, como Texas, hay lugares que pueden cambiar el curso de las elecciones estadounidenses: son los llamados Estados bisagra o púrpura, por no ser ni rojos ni azules, y es donde más tiempo pasan los candidatos. De esta forma, Pensilvania adquiere un protagonismo especial cuando se trata del periodo electoral de Estados Unidos, pues es el más poblado de los púrpura y el que más votos electorales reparte, concretamente 19.
En 2016 fue Donald Trump quien se llevó el Estado y en 2020, Joe Biden. María Carou, corresponsal de RNE en Estados Unidos, visita Pensilvania para entender qué preocupa a sus ciudadanos y cómo lo que voten puede determinar el futuro de los próximos cuatro años de este país.