La violencia en la República Democrática del Congo (RDC) se endurece. La guerrilla M23 ha tomado la ciudad de Goma, en el oeste del país, después de violentos enfrentamientos con el Ejército de RDC. Hay decenas de muertos y cientos de miles de civiles intentan huir a la vecina Ruanda. La ONU ha advertido de la grave crisis humanitaria en la región. El conflicto de RDC es uno de los que lleva más décadas activo: tiene sus raíces en la época colonial y en la lucha entre etnias.
Olatz Cacho, portavoz de Amnistía Internacional, asegura que los recientes combates han desplazado a unas 400.000 personas y han agravado la crisis humanitaria que sufre la región. "No es normal que esta población, que vive en una zona tan rica, sufra tanta pobreza, tanta inseguridad y tantas violaciones de derechos humanos durante tantísimos años", ha denunciado Cacho y ha asegurado que la "impunidad es un problema que hay que combatir".
Cacho explica que otro de los factores que agrava este conflicto son los minerales como el estaño y el coltán, imprescindibles para la fabricación de teléfonos móviles y ordenadores. "Países como China o Estados Unidos no regulan adecuadamente sus cadenas de suministro y permiten la entrada de minerales sin verificar si su origen es ético o no", ha denunciado Cacho.