Un año más, el ocho de marzo, Día Internacional de la mujer trabajadora, conmemora la lucha por la igualdad y nos evoca historias de mujeres luchadoras y emprendedoras que han sido y son capaces de cambiar el mundo. Pero junto a esa realidad están también las historias de violencia, desigualdad y maltrato que millones de mujeres sufren en diversas partes del Mundo.
La situación de las mujeres en Afganistán es especialmente delicada porque muchos temen que la retirada de la comunidad internacional provoque un retorno a las costumbres del pasado en las que el régimen Talibán sometía a las mujeres a todo tipo de vejaciones y les prohibía cualquier tipo de actividad pública. El pueblo afgano se enfrenta ahora al gran reto de gestionar su futuro y romper con las ataduras de los más radicales que criminalizan a las mujeres por el hecho de estudiar o trabajar.