Estados Unidos y Rusia han acordado este miércoles mantener cuanto antes conversaciones entre mandos militares sobre los bombardeos que ambos países están efectuando en Siria. El acuerdo tiene como objetivo "evitar incidentes indeseados".
Desde Washington, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, ha asegurado que el primer ataque aéreo ruso en Siria parece haber ocurrido en una zona sin control del grupo yihadista, algo que también ha denunciado la oposición al régimen de Bachar al Asad.