El Gobierno seguirá trabajando en los foros diplomáticos para dar una respuesta a la decisión argentina de expropiar YPF y agradece el apoyo recibido de la Unión Europea y Estados Unidos, tras una semana intensa y difícil para las relaciones entre España y Argentina. La decisión del Gobierno de Cristina Fernández de expropiar YPF, la filial de Repsol, levantaba ampollas a este lado del Atlántico. Medida que ha lesionado las históricas buenas relaciones entre ambos países. Repsol anuncia que acudirá a los tribunales para que Argentina pague la cantidad que reclama la petrolera por la nacionalización: 8.000 millones de euros. Algo que Buenos Aires asegura que no hará. La mayoría de los líderes latinoamericanos apoya a España tras una decisión que consideran injusta y perjudicial para la región. De hecho, otras empresas españolas asentadas en Argentina siguen con preocupación esta crisis, porque creen que también podría afectar a sus inversiones.