Después de casi una semana se ha logradoestabilizar el incendio de Bejís, en Castellón, que ha calcinado cerca de 20.000 hectáreas y ha obligado a realojar a casi 3.000 vecinos. Una estabilización que no significa que se haya controlado, recuerda en Las mañanas de RNE Las mañanas de RNE la consejera de Justicia, Interior y Administración Pública de la Generalitat Valenciana, Gabriela Bravo. "No podemos bajar la guardia", afirma, pues hay que controlar que no se reavive ninguno de los frentes. Este incendio se ha sumado a otros en el territorio y han convertido a la comunidad en una de las más afectadas. "Han sido unos días terribles", dice la consejera, aunque en este momento "podemos respirar".
Bravo anuncia que el próximo lunes van a aprobar un plan integral para la recuperación forestal y económica de las zonas afectadas. "Vamos a poner en marcha medidas para que toda esta zona pueda recuperarse y no les vamos a dejar solos", señala. "Una vez se de por extinguido vamos a seguir incentivando el turismo rural, que era la fuente de riqueza más importante de todos estos pueblos afectados", acaba diciendo.
Sobre la no suspensión de la actividad del tren en Bejís que se metió en una lengua de fuego, afirma la consejera que están pendientes del informe "para saber qué pasó" pero recuerda que las decisiones en ese momento se tomaron rápidamente porque el viento cambió en poco tiempo y obligó a cambiar la estrategia en pocos minutos. En referencia a la petición de la oposición de comparecer para dar explicaciones sobre las actuaciones, afirma que está dispuesta "a dar la cara siempre", pero pide esperar a la resolución del puesto de mando avanzado.