El bombardeo en los Altos del Golán, territorio sirio ocupado por Israel, que este sábado dejó una docena de muertos, la mayoría menores, amenaza con provocar una extensión del conflicto entre Israel y Hizbulá. El grupo libanés sigue negando su implicación, y Líbano cree que no está detrás del bombardeo, pero Estados Unidos ha dado la razón a Israel.
Israel ya ha respondido atacando objetivos en el interior y sur del Líbano. Pero el primer ministro, Benjamín Netanyahu, quiere ir más allá. Por eso ha adelantado su regreso de Estados Unidos y ha reunido de urgencia al gabinete de seguridad.
El gobierno libanés pide protección frente a posibles ataques de Israel. También por eso, milicianos de Hizbulá están abandonando posiciones tanto en el sur de Líbano como en Siria. Con todo, los libaneses mantienen la calma, esperando que no estalle otra guerra como la de 2006.
Foto: Jalaa MAREY / AFP