Moscú ha sufrido uno de los peores golpes en estos meses de ofensiva ucraniana, ya que la explosión de un camión al paso de un tren cargado de combustible ha provocado la destrucción del puente Kerch. Se trataba del puente que unía Rusia con la península de Crimea, un punto de vital importancia para los intereses del Kremlin.
Rusia ha confirmado que dos de los cuatro carriles para vehículos se han hundido y que la vía férrea está temporalmente inutilizada por el fuego. Se trata de un ataque con dos consecuencias graves para Putin: estratégicamente supone cortar la principal vía de suministro militar a Crimea, pero además es un golpe personal para el presidente ruso, ya que la inauguración del puente hace cuatro años significó todo un símbolo del viejo sueño de Rusia.
El estratégico puente de Kerch, que une la anexionada península de Crimea a Rusia, ha amanecido este sábado en llamas después de que una explosión provocara un gran incendio que ha dañado parte de su infraestructura, obligando a suspender el tráfico automovilístico y ferroviario. Guerra Ucrania - Rusia, en directo. Foto: SECURITY SERVICE OF UKRAINE / AFP.
Los chilenos deberán votar si aprueban o no la nueva Constitución que enterrará la Carta Magna vigente desde la época de Pinochet el 4 de septiembre. No está claro que tenga un apoyo mayoritario, hoy hablaremos con Fernando Atria, quien ha sido miembro de la Convención y ha redactado ese borrador que será sometido a referéndum. Antes de ello nos detenemos en Ucrania para conocer las últimas informaciones sobre el conflicto y miramos a Estados Unidos donde se celebran las primarias de los republicanos en Wyoming y en Alaska. También hablamos del debate que se desarrolla en Naciones Unidas en Nueva York para lograr un acuerdo sobre los oceános.
La guerra en Ucrania pone en peligro el patrimonio cultural del país. Hace años, antes de que las tropas rusas invadieran la península de Crimea, una colección de objetos arqueológicos salió de allí y aún no ha vuelto: sigue custodiada en un museo holandés. Son hallazgos arqueológicos de Crimea, que viajaron prestados, pero durante la exposición, las tropas rusas se anexionaron la península ucraniana. Al terminar su préstamo, el museo no sabía a quién devolverlos.
En apenas 24 horas, las tropas rusas han entrado en Kiev, la capital de Ucrania. Ha sido una ofensiva relámpago aunque las fuerzas de Putin aún no controlan los centros más sensibles y estratégicos de poder, los edificios del gobierno entre ellos. Según los analistas, el principal objetivo estratégico militar es aislar Kiev "para doblegar al Gobierno que está en el poder".
Primero bombardearon instalaciones militares ucranianas y eso abrió paso a una invasión desde tres frentes. Por el norte, la zona de Chernóbil se convirtió en un objetivo para asegurar el avance sobre la capital. Al mismo tiempo, decenas de tanques entraban por el sur, desde la península de Crimea. El tercer frente está en el este. Tras bombardear la principal base militar cerca del Donbás, tropas rusas avanzaban con el apoyo de las milicias separatistas.
Las diplomacias de Estados Unidos y Rusia han matenido una reunión en Ginebra para intentar rebajar la tensión sobre Ucrania. El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken y su homólogo ruso, Sergey Lavrov, han comparecido por separado en rueda de prensa tras el encuentro que ha durado unas dos horas.
Un encuentro del que no salieron resultados concretos más que la voluntad de Moscú de mantener abierto un canal diplomático de interlocución para intentar resolver una crisis acelerada por el masivo despliegue de tropas rusas en su frontera con Ucrania.
Los dos representantes diplomáticos llegaron con las líneas rojas bien marcadas pero con voluntad de diálogo. Lavror ha prometido que Rusia no tiene intención de invadir Ucrania pero también ha reiterado que quieren un compromiso por escrito de que esta exrepública soviética no se adherirá a la OTAN y que los soldados estadounidenses se marcharán de los países limítrofes con Rusia. También ha criticado lo que ha calificado como "rusofobia" e histeria por parte de los países occidentales. Lavrov también ha asegurado que Blinken se ha comprometido a una respuesta por escrito de las peticiones la próxima semana. Por su parte, el jefe de la diplomacia estadounidenses ha señalado que no van a dar marcha atrás a la política de puertas abiertas de la OTAN, ha pedido a Rusia más transparencia y ha criticado la desestabilización que Moscú lleva a cabo, no solo en Ucrania, sino en el resto del mundo. Dice queMoscú solo tiene dos opciones: o el diálogo o el conflicto. Las conversaciones seguirán la semana que viene con el objetivo de rebajar la tensión que hoy se vive.
Los expertos creen que las propuestas de Moscú de que Ucrania nunca sea miembro de la OTAN y la retirada de fuerzas de otros países de las fronteras con Rusia son muy difíciles de cumplir. Y Rusia quiere seguir influyendo sobre Ucrania.