Tras cuatro horas y media de reunión, el Consejo Europeo volvió a no llegar a un acuerdo sobre cómo paliar los efectos económicos de la pandemia de COVID-19. Ahora le toca a la Comisión Europea presentar en los próximos días una propuesta concreta que explique cómo será el fondo que utilizarán los países. Ursula von der Leyen ha avanzado que irá vinculado al presupuesto comunitario, que los Estados deberán aumentar sus aportaciones a casi el doble y habla debillones de euros "entre préstamos y subvenciones". Esto último es lo que separa a los miembros: los países del sur quieren dinero a fondo perdido, mientras que los del norte defienden que se deberían dar préstamos que posteriormente serían devueltos. Charles Michel, presidente del Consejo, manifestó su "sensación real de que estamos ante un asunto urgente", mientras que Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, ha advertido a los países que se tomen el asunto en serio, pues la recesión será profunda y teme que lo que se haga sea poco y tarde. Asimismo, el BCE ha anunciado que comprará deuda de baja calidad para aliviar las cuentas de los países más afectados.
Representantes de doce países, así como de la ONU, la Unión Africana, la Unión Europea y la Liga Árabe han considerado fórmulas para impulsar un proceso de paz en Libia, siguiendo los principios de la llamada "iniciativa de Berlín", en una reunión celebrada al margen de la Conferencia de Seguridad de Múnich.
En esa batalla uno de los generales más poderosos sería Mark Zuckerberg, presidente y consejero delegado de Facebook, que ha sido presentado en la Conferencia de Seguridad de Múnich como el presidente del país más poblado de la tierra, si la red social fuera un país. Zuckerberg es partidario de "una regulación en cuatro campos: las elecciones, la privacidad, los contenidos denigrantes y la economía de los datos". Además, asegura que no quiere que los valores sociales, la seguridad y la democracia queden en manos de empresas privadas, como Facebook o Huawei.
Donald Trump ha aprovechado su presencia en Davos para promocionar la economía de su país que vive, dice el presidente, el mejor momento de su historia. Además ha quitado importancia a la emergencia climática, sólo unas horas después de que Greta Thumberg hablara en esa misma tribuna.
Brasil y Australia son dos de los países que han conseguido retrasar la adopción de medidas sobre una mayor regulación del mercado de carbono y emisiones de CO2. También han dificultado el acuerdo Japón, que ha construido doce nuevas plantas de carbón, e India. Por su parte, China, el mayor emisor de gases de efecto invernadero, solo se compromete a reducir sus emisiones a partir de 2023. Tampoco Arabia Saudí quiere oir hablar de emergencia climática. En Europa, Polonia, Hungría y República Checa se han opuesto a llegar a emisiones netas nulas en 2050. Estados Unidos, que ha acudido a Madrid con una delegación de perfil bajo, ya ha dicho que abandona los acuerdos de París.
El Gobierno suizo y ACNUR, Agencia de la ONU para los refugiados, son los organizadores. En RNE hemos hablado con María Jesús Vega, portavoz de ese organismo en España y nos señala que es un momento histórico "es la cumbre más importante del siglo XXI para movilizar acción. Tenemos refugiados, jefes de estado y de gobierno, el secretario general de la ONU, el sector privado, grupos religiosos. Todo para mejorar la stiuación de los refugiados y de las comunidades que les acogen.
Sobre los objetivos que esperan conseguir en este encuentro internacional de dos días la portavoz de ACNUR en España nos dice que "pensamos poder hacer compromisos en materia, por ejemplo,de vías legales. Poder dar acceso a personas refugiadas en situaciones difíciles, en situaciones de riesgo, en países de asilo que necesiten aliviar la presión que tienen. Algunos países tienen un millón de refugiados. Algunos sotitnen tres millones como Turquía. Líbano tiene millón y medio. Necesitamos esos apoyos legales para ayudar a aesos países que acogen a casi el 86 por ciento de los refugiados.
El apoyo económico del sector privado es primordial para formación, empleo, tecnologia y trabajar más estrechamente con Naciones Unidas, comenta en RNE María Jesús Vega. También nos comenta que se hablará de experiencias positivas y de iniciativas, por parte del Gobierno español. Sobre el reparto y de refugiados también espera avances porque en el Pacto Mundial se dijo que la responsabilidad de protegerlos es de todos y muchos siguen cerca de áreas de conflicto y los países más ricos siguen poniendo muchos trabas para su acogida. 15/12/19
Los casi 200 países que participan en la Cumbre del Clima han reanudado este sábado las conversaciones para cerrar el acuerdo con el que se allane el camino a la entrada en vigor el Acuerdo de París en el 2020. Sin embargo, las discrepancias entre los países en temas como los mercados de carbono, cuestiones de género o derechos indígenas han obligado a que la lectura de las conclusiones, se hayan retrasado en varias ocasiones a lo largo de la jornada.
De Estados Unidos llega una delegación de 16 congresistas y senadores encabezados por la presidenta democráta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Habrá varios jefes de Estado latinoamericanos, entre ellos Mauricio Macri, presidente saliente de Argentina, y el ecuatoriano Lenín Moreno. También estarán los de Costa Rica y Honduras, pero no el de Chile, el país donde se debería haber celebrado la cumbre, que sigue agitado por protestas sociales. De Europa estarán el primer ministro francés Édouard Philippe, el de Portugal Antonio Costa, y también los de Polonia, Grecia y Países Bajos. Además, habrá representantes de primer nivel, pero poco conocidos, de países africanos y del Pacífico. Greta Thunberg será una de las protagonistas, aunque no estará en la sesión inaugural porque está cruzando el Atlántico en velero y no tiene previsto llegar a Lisboa hasta el martes.
España y Chile han entregado simbólicamente a la ONU las instalaciones de la cumbre mundial del clima (COP25) que albergará el recinto ferial de Ifema en Madrid. En este acto protocolario de "cesión" de las instalaciones de la cumbre a Naciones Unidas han participado la ministra para la Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, junto con su homóloga chilena, Carolina Schmidt -Chile preside la cumbre, aunque se celebre en Madrid- y la secretaria Ejecutiva de la ONU sobre Cambio Climático, Patricia Espinosa.
La ministra para la Transición Ecológica en funciones, Teresa Ribera, ha dicho que el éxito de la cumbre no se medirá tanto por nuevas decisiones que puedan adoptarse sino por el reforzamiento de la transversalidad de las políticas climáticas a todos los ámbitos y sectores.
Esta cumbre no solo supondrá un reto organizativo, sino también, y principalmente, un reto para luchar contra el cambio climático. El Acuerdo de París firmado en 2015 en la COP21 es el mayor acuerdo vinculante frente a la crisis climática. Establece un plan de acción mundial para limitar el calentamiento global muy por debajo de los 2 grados y proseguir los esfuerzos para que no supere los 1,5 grados.
El presidente de Ifema, Clemente González, ha asegurado este sábado que la institución ferial está trabajando ya en la organización de la Cumbre del Clima, que afronta como "un reto y una ilusión". Tras conocer ayer que el recinto albergará la Conferencia sobre Cambio Climático de Naciones Unidas (COP25) entre el 2 y el 13 de diciembre, ha dicho que supone "un reto muy importante para Ifema", ya que la organización de este tipo de cumbres suele durar un año y en este caso solo hay cuatro semanas por delante, y al mismo tiempo "una ilusión", porque "es un acontecimiento muy importante para España y para Madrid". "Desde Ifema queremos echar el resto para que salga lo mejor posible", ha manifestado González en declaraciones a Europa Press, al tiempo que ha precisado que hay que reorganizar la planificación de actividades del mes de diciembre desde el punto de vista de ubicaciones y de fechas, que es en lo que están trabajando ya desde ayer "a tope"· 2/11/19