Pese a que los políticos no hablaran de ello, fue una de las noticias de este martes. Representantes de todos los partidos políticos, así como muchas otras personalidades públicas, asistieron a la celebración del quinto aniversario del diario El Español, una fiesta a la que acudieron, según el medio, unas 80 personas, entre las que se encontraban cuatro ministros, líderes principales de partidos de la oposición e instituciones varias. Pese a las explicaciones del digital, que asegura que se cumplían las restricciones y que todos estaban en su casa antes de las once de la noche, las imágenes han provocado la indignación de la población en un momento en el que muchos ciudadanos ni siquiera pueden pisar un bar. Sin embargo, esto no es exclusivo de España y en otros países estamos viendo comportamientos que no ayudan a combatir la pandemia y que repasaremos junto nuestros corresponsales. En esta Mesa del Mundo se sientan con nosotros el corresponsal de Radio Nacional en Estados Unidos, Fran Sevilla; la corresponsal en Oriente Próximo, Cristina Sánchez; el corresponsal en Italia, Jordi Barcia; y el corresponsal en Francia, Paco Forjas.
El próximo 3 de noviembre, dentro de justo una semana, los estadounidenses acuden a las urnas para elegir a su nuevo presidente. También para elegir a la nueva cámara de representantes y para renovar un tercio del Senado. Hoy, en nuestra mirada al mundo, queremos acercarles la realidad de los habitantes de Washington, la capital de Estados Unidos. El Distrito de Columbia no es formalmente un estado de la Unión y por lo tanto sus ciudadanos no pueden votar en las elecciones legislativas. Cientos de miles de personas no podrán elegir a sus representates en el Congreso, lo que constituye una importante anomalía democrática, como nos cuenta Alejandra Martínez en este reportaje.
Más de 60 mil residentes han tenido que ser evacuados en California, Estados Unidos, por el avance de dos incendios. El más importante se encuentra a unos 50 kilómetros al sur de Los Ángeles. Dos bomberos están heridos graves.
El segundo fuego se está propagando por el norte. Vientos cercanos a más de 100 kilómetros por hora avivan las llamas y dificultan las labores aéreas de extinción. En lo que va de año, se han quemado casi 16 mil kilómetros cuadrados sólo en California.
Es el encargado de asumir plenos poderes en caso de muerte o incapacidad del presidente, lo que ha ocurrido 8 veces en la historia. El vicepresidente es consejero y representante del presidente. Suele ejercer de nexo con el Congreso en su condición de presidente del Senado que le otorga un papel meramente representativo pero que le permite deshacer empates en las votaciones.
Los demócratas suelen dominar la costa Oeste, parte de los Grandes Lagos y el norte de la Este. En el lado rojo republicano, el medio Oeste, las zonas montañosas y el sur. Hay once estados, los denominados bisagra, en los que no domina un partido en concreto. Florida, Ohio y Iowa son los más determinantes.
La Constitución marca tres requisitos: tener al menos 35 años; haber vivido en EEUU un mínimo de 14 y ser ciudadano estadounidense de nacimiento. En teoría, los requisitos pretenden limitar el acceso a extranjeros, pero algunos conceptos se han vuelto ambiguos y la Carta Magna no los resuelve.
Se suele decir que estado de Ohio o el Dow Jones predicen los resultados de las elecciones, pero hay otro indicador infalible en la cultura popular, que son las caretas del presidente que se venden para la noche de Halloween. La cara que más se vende suele ser siempre la que triunfa en la noche electoral.
Los demócratas han ganado en 20 ocasiones y los republicanos en 23. Ha habido más comicios, pero los han ganado, sobre todo en los primeros años, otros partidos, como los federalistas o el Whig.
El demócrata Franklin Delano Roosevelt, trigésimo segundo presidente de los EEUU. Estuvo en la Casa Blanca desde 1933 hasta su muerte en 1945. Es el único que ganó cuatro elecciones seguidas, cuando no existía la enmienda que pone el límite en los dos mandatos.
Trump bate el récord de ceses y dimisiones forzosas entre sus colaboradores en cuatro años de gobierno
- Durante su mandato se han producido 40 ceses y dimisiones, forzosas la mayoría
- Especial Elecciones EE.UU.
De los 44 presidentes que ha habido, 18 se quedaron en un solo mandato. Algunos porque no revalidaron y otros porque murieron o fueron asesinados antes de completar su primera legislatura, como es el caso de Abraham Licoln, James Garfield o Zachary Tylor.
Hacer un cálculo es difícil porque a las grandes donaciones se suman muchas pequeñas. En julio Trump llevaba 347 millones de dólares recaudados y Biden 328, aunque el demócrata batió un récord en agosto de 350 millones en un solo mes. La recta final de la campaña es la más cara y en la que más fondos se recaudan, pero aún no hay datos.
Porque Robert Cleveland fue presidente dos veces, pero en periodos separados, que se cuentan como dos presidencias diferenciadas, aunque fuese la misma persona. El resto de presidentes han tenido un mandato único o varios consecutivos.
En 1920 se aprueba la enmienda que permite el voto femenino, que ha sido variado en estos 100 años. Su voto es muy heterogéneo, y en su inicio marcado por los hombres, pero desde 1980 la tendencia es que las mujeres se decanten por los candidatos demócratas, mientras que ellos votan republicano.
La Presidencia de Donald Trump ha estado marcada de polémica desde el inicio, incluso en el seno de su Administración. En cuatro años, decenas de colaboradores han sido despedidos o han dimitido por sus diferencias con la política de Trump: desde el ideólogo Steve Bannon, al asesor de Seguridad, John Bolton, jefes de gabinete o secretarios de comunicaciones. Algunos hacen ahora campaña contra él e incluso cuestionan que esté capacitado para asumir un nuevo mandato. [Especial: elecciones Estados Unidos]
No. De hecho, ha habido cinco ocasiones en las que el presidente obtuvo menos votos que su rival. La última fue 2016, cuando Donald Trump se convirtió en presidente a pesar de lograr 3 millones de votos menos que Hillary Clinton. En el año 2000, George W. Bush fue elegido presidente a pesar de obtener menos votos que Al Gore. En EE.UU. los ciudadanos no votan directamente al presidente, sino que eligen a los 538 compromisarios del Colegio Electoral que elegirá, en diciembre, al nuevo inquilino de la Casa Blanca.
Pueden votar todos los ciudadanos estadounidenses, residan o no en EE.UU., que tengan más de 18 años y que se hayan registrado para votar. No pueden votar, sin embargo, habitantes de territorios como Puerto Rico o Guam. Tampoco algunas personas convictas o con determinadas discapacidades intelectuales.
Sucede así desde 1845. Noviembre coincidía con el final de la cosecha y eso facilitaba que la gente pudiera ir a votar. Se eligió celebrar las elecciones en día laborable porque los sábados eran días sagrados para los judíos los domingos para los cristianos. Al optar por el primer martes después del primer lunes de noviembre se evitaba, además, que las elecciones coincidieran con la festividad del 1 de noviembre.
Más de 200 millones pueden hacerlo, pero lo habitual es que la participación no supere el 60%. En las últimas elecciones votaron 136 millones de estadounidenses. El hecho de que se vote en día laborable no favorece la afluencia a las urnas. No obstante, en casi todos los estados se puede votar por adelantado, algo que los estadounidenses han hecho este año, en números récord, por culpa de la pandemia.