Queda apenas un mes para que Donald Trump sea, de nuevo, presidente de Estados Unidos y muchos se preguntan qué hará cuando tome posesión. De momento ya va dando pistas de una enorme ambición más allá de sus fronteras. No cesa en su interés por comprar Groenlandia; lo considera una prioridad para la seguridad de su país y de todo el mundo. Dinamarca, su dueño, ya dijo que no está en venta cuando el republicano intentó cortejarle en 2019.
Más ampollas han levantado sus amenazas contra Panamá. Se ha quejado de los aranceles "excesivos" impuestos a los transportistas estadounidenses y ha insinuado que no permitiría que el canal cayera bajo la influencia china. Estados Unidos construyó el paso centroamericano y lo cedió a Panamá en 1999.
La Corte Suprema de Montana, en Estados Unidos, ha dictaminado por primera vez en la historia que el acceso a un "medio ambiente limpio" y, sobre todo, a un "clima estable" es un "derecho constitucional" de los jóvenes. En esta misma línea, el tribunal también afirma que las políticas que alientan o permiten la quema de los combustibles fósiles, las sustancias que más están alimentando los desastres naturales en el mundo, suponen una "violación los derechos constitucionales" de la población.
Si hay que elegir un nombre y una imagen de Estados Unidos en 2024 es la de Trump celebrando su victoria electoral. Los republicanos se han hecho también con la mayoría en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, en el Senado y controlan el Tribunal Supremo. Trump se imponía así a una candidata improvisada, una Kamala Harris que apenas tuvo 100 días para hacer campaña, después de la renuncia de Joe Biden a la carrera electoral. El traspaso fue rápido, sin primarias, y el Partido Demócrata eligió por primera vez a una mujer negra como candidata a presidenta. A partir del 20 de enero de 2025, volverá a la Casa Blanca un Donald Trump que ha sufrido dos intentos de asesinato y que se ha convertido este año en un delincuente convicto, declarado culpable de 34 cargos. Informa la corresponsal de RNE, María Carou.
Elon Musk no estaba físicamente en el Capitolio, pero sí estaba muy presente. El hombre más rico del planeta había llevado a la Cámara de Representantes y a todo el país, a una situación límite. Se ha hecho más evidente que nunca su influencia sobre el presidente Donald Trump, con quien ya se sabe, forma una dupla inseparable.
Empezamos por el principio:toca aprobar en el Congreso los presupuestos federales, necesario para financiar los servicios y ayudas que dependen del Gobierno y los salarios de sus trabajadores. Republicanos y demócratas habían cerrado un acuerdo, pero hace unos días, Elon Musk empieza a criticarlo con un aluvión de mensajes en X, su red social. Trump se pone de su parte y los congresistas republicanos rompen el pacto.
El presidente electo añade una exigencia: quiere que se suspenda el techo de gasto hasta 2027. Aunque Trump tiene el objetivo de recortar el gasto público -y precisamente ha encargado a Musk esta tarea-, necesita suspender el techo de gasto para cumplir su gran promesa electoral: la costosa deportación masiva de inmigrantes... o para poder bajar impuestos. Los demócratas no ceden.
Al final, in extremis y al tercer intento, han aprobado una financiación provisional, para seguir funcionando durante los próximos tres meses. ¿Qué hubiera pasado sin acuerdo? 875.000 trabajadores federales hubieran dejado de trabajar y 14 millones, los considerados esenciales, hubieran trabajado sin cobrar su sueldo. El acuerdo salva los muebles y le permite a Trump que la votación definitiva se aplace hasta marzo, cuando los republicanos controlarán las dos cámaras del Congreso.
En 2019 cuando Matteo Salvini era ministro del interior tomó la decisión de bloquear el barco de la ONG Open Arms con 147 migrantes a bordo. Hoy se ha conocido la sentencia por los delitos de secuestro de personas y omisión de actos oficiales. Estamos con el enviado especial de Radio Nacional a Palermo, Jordi Barcia y con el catedratico emérito de ciencia política Gianfranco Pasquino. La situación para quienes viven en La Franja es insostenible. Organizaciones humanitarias acusan a Israel de negar a los palestinos servicios básicos. Vamos a hablar de ello. También de Siria donde la Organizacion Internacional para las Migraciones y el ministro de Asuntos Sociales del Gobierno interino se han reunido para intentar coordinar el retorno de millones de sirios refugiados y exiliados en otros países. Estaremos en Estados Unidos para saber si la falta de fondos desemboca en el cierre de algunas agencias gubernamentales y repasaremos cómo ha sido este año en el país que sufre la peor crisis humanitaria de la actualidad: Sudán.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos, de mayoría republicana, ha rechazado este jueves una prórroga de los presupuestos hasta marzo presentada por los conservadores para evitar el cierre del Gobierno, que se producirá en la medianoche del viernes al sábado si no se llega a un acuerdo.