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Los habitantes de las Antillas Menores en el Caribe se preparan para la llegada de un nuevo huracán cuando aún no han acabado de evaluar los daños de Irma, que arrasó las islas hace menos de dos semanas. Ahora es el huracán María, de fuerza 1 (la más baja en el nivel de huracanes; Irma tenía fuerza 5) el que se acerca desde el Atlántico.

Según el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (NHC en sus siglas en inglés), el ojo de María se encuentra a 215 kilómetros al sureste de Dominica, con vientos máximos de 150 kilómetros por hora.

Dominica se halla bajo aviso de huracán, mientras Santa Lucía está bajo aviso de tormenta tropical. Las islas Antigua, Barbuda, Saint Kittis, Nevis y Monserrat, así como Guadalupe, Saba y San Eustaquio, San Martín y San Bartolomé, y Anguila se hallan bajo alerta de huracán; mientras que Martinica, Barbados y San Vicente y las Granadinas están bajo advertencia de tormenta tropical.

Corea del Norte ha lanzado un nuevo misil de alcance intermedio "en dirección este", que ha sobrevolado la isla japonesa de Hokkaido y ha caído en aguas del Pacífico, a 2.000 kilómetros del este de Cabo Erimo, en Hokkaido. El misil ha alcanzado una altura de 770 kilómetros y ha recorrido una distancia de 3.700 kilómetros. Washington ha confirmado que no ha supuesto ninguna amenaza sobre la isla de Guam, donde el país tiene base militar y que ha sido amenazada en varias ocasiones por Kim Jong-un.

Una residencia de ancianos ha sido evacuada en Florida para impedir otra tragedia como la de la pasada semana en la que los cortes de suministro eléctrico a causa del huracán Irma provocaron la muerte de seis ancianos que se quedaron sin aire acondicionado. Poco a poco la zona, que ha sido visitada este jueves por el presidente Donald Trump, afronta lo que parece ser una larga y complicada recuperación. Y en medio del desastre, un pequeño milagro de esperanza: Destiny, una niña nacida en plena tormenta, vive y lo hace completamente sana.

El número de muertos a causa del huracán Irma en los Cayos de Florida ha aumentado a ocho este miércoles y se teme que pueda crecer más a medida que los cuerpos de rescate buscan casa por casa entre los escombros que dejó el paso del ciclón por estos islotes del extremo sur de Estados Unidos. Las autoridades del condado de Monroe, donde está el archipiélago en el que tocó tierra el huracán el pasado domingo con categoría 4, detallaron que las personas murieron como consecuencia directa de la tormenta y debido a causas naturales.

La portavoz del condado de Monroe, Cammy Clark, ha dicho en rueda de prensa que el personal militar ha ayudado a las autoridades locales a despejar los escombros para colaborar en la búsqueda de personas que se quedaron en sus casas durante la tormenta. Dos de los residentes murieron en Cayo Hueso, y los otros seis en otras partes del condado Monroe, mientras que otras 40 personas resultaron heridas. El número total de muertos en EE.UU. asciende a 36, según Reuters. Desde el medio día del lunes los cuerpos de socorro empezaron a recorrer casa por casa entre los escombros, una vez que las empresas de obras públicas comenzaron a limpiar los primeros tramos de la autopista US1, la única que conecta la isla con el continente. Los Cayos de Florida, que el huracán arrasó con vientos de 215 kilómetros por hora la madrugada del domingo, sufrieron uno de los peores impactos del huracán en Florida. La primera víctima conocida en el condado de Monroe fue un hombre que falleció el pasado el día 9 después de que perdiera el control de la camioneta que conducía debido, supuestamente, a un golpe de viento.

  • El número total de muertos por el huracán en EE.UU. asciende a 36
  • Mueren ocho ancianos en Florida al quedar sin electricidad un asilo
  • Millones de personas permanecen sin suministro eléctrico tras el huracán
  • Las áreas más afectadas son Cudjoe Key, donde Irma tocó tierra, y Big Pine Key

Florida ha podido confirmar los malos presagios de los meteorólogos sobre el poder destructor del huracán Irma, que ya se ha degradado a depresión tropical. Hasta el momento, se han confirmado al menos siete muertos en Florida, tres en Georgia y cuatro en Carolina del Sur, en total son 14 muertos en territorio estadounidense. Además, la tormenta mantiene a oscuras más de 7,4 millones de personas.

El ciclón, debilitado el lunes al convertirse en tormenta tropical y que la mañana del domingo alcanzó los Cayos con categoría 4, ha descargado fuertes cantidades de agua y ha arreciado con una peligrosa marejada ciclónica que ha inundado varias ciudades del estado.

Según el último parte del Centro Nacional de Huracanes (CNH), Irma se encuentra a unos 150 kilómetros del suroeste de Atlanta y presenta vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora. Esta madrugada la tormenta se convirtió en ciclón post-tropical sobre Alabama, donde deja unas fuertes lluvias que también se sienten en el vecino Tennessee.

Las primeras labores de socorro ya han comenzado, con el envío de 10.000 militares al estado para atender a los afectados, mientras Florida intenta recuperar la normalidad y comprobar el alcance de los daños.

Irma prosigue este martes su paso rumbo al norte, cerca de Tallahassee, la capital del estado, y con dirección al sureste estado de Georgia, donde, al igual que en Carolina del Sur y Alabama, ya se empiezan a notar sus primeros efectos en forma de vientos y lluvias.

Florida ha podido confirmar los malos presagios de los meteorólogos sobre el poder destructor del huracán Irma, que ya se ha degradado a depresión tropical. Hasta el momento, se han confirmado al menos siete muertos en Florida, tres en Georgia y uno en Carolina del Sur y la tormenta mantiene a oscuras más de 7,4 millones de personas. Según el último parte del Centro Nacional de Huracanes (CNH), Irma se encuentra a unos 150 kilómetros del suroeste de Atlanta y presenta vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora. El ciclón, debilitado el lunes al convertirse en tormenta tropical y que la mañana del domingo alcanzó los Cayos con categoría 4, ha descargado fuertes cantidades de agua y ha arreciado con una peligrosa marejada ciclónica que ha inundado varias ciudades del estado. Las primeras labores de socorro ya han comenzado, con el envío de 10.000 militares al estado para atender a los afectados, mientras Florida intenta recuperar la normalidad y comprobar el alcance de los daños.

Los Cayos, un conjunto de islas e islotes en el extremo sur del estado, que recibieron el impacto de vientos máximos sostenidos de 210 km/h, han sido sin duda una de las áreas más afectadas, tal y como ha constatado el gobernador del estado, Rick Scott, tras sobrevolar la zona. "Mi corazón está con la gente de los Cayos de Florida", ha asegurado Scott en una rueda de prensa, y ha asegurado que "un largo camino para la recuperación".