La guerra sigue provocando un éxodo incesante de refugiados, sobre todo hacia Polonia. En el punto fronterizo de Medyka, donde se encuentran los enviados especiales de RNE, Fran Sevilla y Fernando Martínez, llegan cada sábado centenares de voluntarios desde todas partes de Europa. Dejan material humanitario y se llevan a refugiados. Hoy lo ha hecho un grupo de 9 catalanes, llegados desde Barcelona, que han hecho crowfunding para poder lograr los medios. Salieron el jueves por la noche, con tres furgonetas y un coche, y pretendían volver y parar a dormir en Francia, pero su ruta se desvía hasta Cracovia para seguir recogiendo a más personas.
Algunos de esos refugiados llegan desde hace días a España, donde se enfrentan a la incertidumbre de haber dejado atrás sus casas y a un largo trámite burocrático. En Barcelona, el pabellón 7 de la Feria ha estado recibiendo refugiados ucranianos toda la noche. El ambiente es tranquilo, pero los ucranianos que se han acercado para tramitar los permisos de trabajo y residencia explican que es muy complicado conseguir cita y los teléfonos están colapsados.
Informa Juanfra Álvarez