Ricard Ferrer, presidente de los intensivistas españoles y jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Vall d'Hebron en Barcelona, ha pedido que se apliquen "medidas contundentes" para conseguir que haya menor circulación comunitaria de la COVID-19 y detener así el incremento de ingresos en los hospitales y en las UCI en particular.
En una entrevista en el Telediario, ha señalado que en este mes de septiembre se han incrementado mucho los ingresos en UCI hasta un nivel que no esperaban hasta "más avanzado el otoño".
Aunque cree que los hospitales españoles están "mucho mejor preparados" en este momento que en los meses de marzo y abril, en la primera ola de la pandemia, y que ahora los pacientes "llegan más escalonados", sostiene que tienen que tomarse medidas cuanto antes, porque los efectos de estas no empezarán a verse hasta que pasen al menos dos semanas, y que la actual saturación de las UCI, en algunos hospitales de Madrid y Cataluña por encima del 100% de su capacidad habitual, compromete la asistencia sanitaria en otras unidades.
En el Hospital de Cruces, en Vizcaya, el personal sanitario continúa luchando contra la segunda oleada de COVID-19 con el mismo empeño que en la primera. Dentro, sus testimonios ponen de manifiesto la responsabilidad que los sanitarios mantienen dentro y fuera del trabajo. Es el caso del jefe de Medicina Intensiva Fermín Labayen, que aún no conoce en persona a su nieto, o el de la supervisora de UCI Marisa Millán, que desea que su hijo pueda salir a jugar con sus compañeros. Para ellos, además de las medidas de seguridad decretadas por las autoridades, también deben renunciar a algunas partes de su vida personal. [Coronavirus: última hora en directo]
Las cifras de pacientes de COVID-19 ingresados en UCI en las comunidades autónomas que ofrece el Ministerio de Sanidad no coinciden con las que manejan los médicos intensivistas. Los especialistas alertan de que la ocupación de camas supera ya el 100 % en la mayoría de los hospitales de Madrid y aseguran que hay saturación en casi todas las grandes capitales. La discrepancia está en la capacidad de flexibilización de las camas. [Coronavirus: última hora en directo
Los hospitales en Israel están al límite por el repunte de los contagios de COVID-19 en el país, y en los últimos días ya se han llenado las UCI. "Estamos preocupados, especialmente por los que están en situación crítica", asegura un médico. En las últimas horas se han contabilizado casi 7.000 nuevos contagios, récord en toda la pandemia. El Gobierno admite que el segundo confinamiento no es suficiente y estudia endurecer las restricciones de movilidad. [Coronavirus: última hora en directo[Coronavirus: última hora en directo]
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha apuntado a la falta de médicos y otros trabajadores sanitarios como una de las causas de la saturación en la Atención Primaria en la pandemia del coronavirus. Los profesionales aseguran que el 50 % de los médicos trabajan en la precariedad y que no hay suficientes plazas de especialistas. Es el caso de Cristina, médico de familia que ha aprobado el MIR este año y que ha firmado unos 18 contratos en tres meses. La precariedad y la estabilidad llevaron a Belén, enfermera, a marcharse a Noruega porque trabajaba unos cinco meses al año. [Coronavirus: última hora en directo
El coordinador del CCAES, Fernando Simón, considera que, si la evolución de la pandemia es como hasta la fecha, en estos momentos sí hay "suficientes equipos" médicos, después de que la primera ola de contagios "se pasara con muchas complicaciones". Según Simón, "la segunda ola no va a tener un impacto tan grande", aunque admite que el número de médicos es "limitado": "A todos nos gustaría tener más médicos de los que tenemos, pero los médicos que hay en España son los que hay".
Fernando Simón, director del CCAES, considera que a nivel global hay un incremento que puede percibirse en la ocupación hospitalaria y en la presión asistencial: "Tenemos el 9,5 % de las camas ocupadas". Se incrementan progresivamente tanto las hospitalizaciones en planta como en UCI. Además, ha señalado que la letalidad del virus es de un 0,9 %, algo dentro de lo esperado.
La segunda ola de coronavirus en España ha llegado antes de lo esperado. La curva de contagios está descontrolada. Sanidad ha pasado de notificar 65 ingresos a la semana en agosto a 185, casi el triple, ahora en septiembre. 1.354 pacientes están graves en España en las UCI.
El 40% de las camas de cuidados intensivos en Madrid están ocupadas por pacientes de COVID19. En algunos hospitales como el Infanta Leonor de Vallecas los profesionales aseguran que están en una situación de pre-colapso.
Es el dato que más preocupa a las autoridades, el de ocupación de camas hospitalarias. En planta es de un 22% en Madrid, seguida por Castilla La Mancha, País Vasco y Aragón. En comunidades con cifras bajas como Baleares está subiendo. Cataluña tiene datos estables y las próximas dos semanas son claves.
Los expertos aseguran que estamos mejor preparados, que conocemos mejor al virus, pero que faltan coordinación y recursos.
La Comunidad de Madrid cuenta, en estos momentos, con 2.869 pacientes ingresados con COVID19, es decir un 16.9% de todas las camas instaladas en los diversos hospitales de la capital. En las UCI, 403 puestos tienen ya pacientes con la efermedad, lo que supone un 41.7% de los cerca de mil puestos operativos en estas unidades, según la última actualizacion de la consejeria de Sanidad. Coronavirus: última hora.
El hospital Infanta Leonor atiende a los habitantes del distrito madrileño más castigado por el virus: Puente de Vallecas. Desde el sindicato de enfermería aseguran estar prácticamente desbordados, con la unidad de cuidados intensivos al limite pese a haber duplicado sus plazas. [Coronavirus: última hora en directo
Lo mismo ocurre en el hospital Severo Ochoa de Leganés. Despues de sumar cinco camas a un total de diez, todas estan ocupadas. Mientras, el avance del coronavirus en Madrid también ha hecho que el hospital Gomez Ulla despliege carpas en su jardín ante el temor de que se saturen las urgencias.
La pandemia deja en las últimas horas 5 muertos y más de 800 nuevos positivos. Ante el aumento de casos confirmados de Covid-19 se prorrogan las medidas especiales en Alcázar de San Juan y en Torrijos y se decretan nuevas medidas en la Pueblanueva durante 14 días. Sin embargo, se levantan las restricciones especiales en Mora y en Yeles.
La atención primaria está "completamente colapsada" y "empieza a haber problemas en los hospitales", denuncia el presidente de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), Julián Ezquerra, que cree que desde la Comunidad de Madrid "se están dando palos de ciego" y no ve "una línea clara de actuación" para hacer frente a la crisis del COVID-19 en la región. [Coronavirus: última hora en directo
"Se hizo una descalada dejando de lado la salud y centrada en criterios socioeconómicos", protesta el especialista, que critica que "en los hospitales se ha mirado para otro lado". "Se ha pensado que con abrir un hospital maravilloso que daba mucho rédito político era suficiente, en lugar de abrir torres o plantas cerradas", protesta.
En cuanto a los confinamientos, destaca su lógica desde un punto de vista sanitario y explica que ya se han aplicado en Aragón, Cataluña, Castilla y León, Galicia y Cantabria. Sin embargo, lamenta, se trata de una decisión en la que, una vez más, "hay que ver qué prima".
"Las UCI se pueden saturar durante los próximos 14 días", advierte el presidente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Ricard Ferrer, que sin embargo, destaca el carácter heterogéneo de la situación en España. "En las zonas donde hay más circulación comunitaria del virus hay más casos en las UCI", asegura el especialista en una entrevista en La tarde en 24 horas, en la que destaca que los pacientes que ingresan en este momento son una carga adicional a la que ya tienen este tipo de unidades que "siempre funcionan a una capacidad prácticamente máxima".
Ante esta situación, Ferrer apunta la necesidad de tomar decisiones para manejar el exceso de pacientes. No obstante, ha afirmado que la situación no es la misma que la del pasado mes de marzo: "los pacientes llegan de forma mucho más escalonada" y "los planes de contingencia han garantizado que tengamos más equipamiento, más material fungible y más EPI".
Los datos del Ministerio de Sanidad señalan cuáles son las comunidades más afectadas por los contagios. La primera, Madrid, con 642 contagios por cada 100.000 habitantes en las últimas dos semanas. Le siguen Navarra, La Rioja, Castilla-La Mancha, Aragón y País Vasco. La media nacional es de 256 casos por 100.000 habitantes. Son datos que colocan a España a la cabeza de Europa en tasa de contagios y eso poco a poco se va notando en los hospitales. Casi nueve de cada 100 camas de hospital ya están ocupadas por pacientes COVID. En el caso de Madrid ya son una de cada cinco camas. Y hay más presión en las UCI de algunos centros.
Todas las comunidades autónomas están tomando nuevas medidas para frenar los contagios de COVID-19 porque en muchas empieza a preocupar la presión en atención primaria y hospitales. La presidenta de La Rioja ha anunciado más restricciones tras explicar que ya están ocupadas el 90% de las camas UCI y que van a habilitar más.
La Comunidad de Madrid ha informado hoy de que en la región, ya hay un 40% de camas de UCI ocupadas. En el informativo 14 horas de Radio Nacional hablamos con el doctor Mario Chico, presidente de la Sociedad Madrileña de Medicina Intensiva de Madrid e intensivista en el Hospital 12 de Octubre de la capital. Sobre los datos que ha dado el gobierno regional Mario Chico aputa: "En mi hospital, y hasta donde tengo conocimiento de hospitales de la Comunidad, la situación no es de esa ocupación. La ocupación ahora es mucho más alta por diferentes razones". El porcentaje, según apunta el doctor Chico, depende de cómo se calcule y de lo que se considere cama de UVI, de si existen o no camas cerradas en los hospitales. "La ocupación es mucho más alta" comenta. "Yo salgo de guardia y existen verdaderas dificultades". Sobre las condiciones de trabajo de los profesionales, las jornadas y las rotaciones, el doctor Chico cuenta que, con51 años, lleva "seis guardias en 15 días" y critica la falta de personal. "Falta personal de enfermería. Ha coincidido en período vacacional. Ahora estamos con un montón de COVID y también casos de otras patologías". El doctor Chico reconoce que le asustan "como ciudadano" las cifras de contagios en la comunidad madrileña y critica la falta de previsión ante la situación: "Los meses pasados fue terrible, hubo un antes y un después, pero nos pilló de sorpresa. Ahora la mayoría de los profesionales tenemos un gran estupor porque esto era esperable y acumulamos un gran cansancio". Los casos de COVID-19 que se ven ahora en las UCI son menos graves, se están ingresando antes y son más jóvenes, según el doctor Chico. "Suben las cifras de ingresados en UVI, de enfermos con ventilación mecánica y estamos todos los profesionales bastante preocupados". ¿Cuál es el estado de los profesionales sanitarios viendo la situación y las actitudes irresponsables por parte de la ciudadanía? "Al fin y al cabo son poblaciones que tienen unos comportamientos culturales que son difíciles de cambiar. Los aspectos organizativos de nuestros gestores sí que nos llaman más la atención". Para acabar, el doctor Mario Chico nos cuenta cómo ve el futuro a corto plazo: "¿Temo que vaya a ocurrir un colapso? Sí, por supuesto que sí. Hay dificultades en Madrid para encontrar camas, para coordinar los traslados entre UVIs. Los profesionales sanitarios venimos de una situación muy, muy compleja. De mucho cansancio, de mucho estrés emocional".
Este lunes se cumplen seis meses desde que se decretara el estado de alarma en España por la epidemia de COVID-19. Una situación a la que "nadie esperaba enfrentarse en el mundo occidental", según los sanitarios que estuvieron en el ojo del huracán. [Coronavirus: última hora en directo
El 14 de marzo decenas de miles de ciudadanos quedaron confinados en sus casas y solo podían salir para lo imprescindible. La decisión se tomó con el objetivo de que las salas de urgencias de los hospitales no se saturaran más de lo que ya estaban, porque ahí era donde se vivían los momentos más dramáticos de la pandemia. "El enorme sacrificio que supuso para muchos de nosotros no puede volver a repetirse, muy pocos estarán dispuestos a hacerlo", advierten.