Los tres barcos que trasladaban a los 630 migrantes rescatados por el buque Aquarius en el Mediterráneo central han llegado al puerto de Valencia tras una travesía de ocho jornadas que han tenido que realizar después de que Italia y Malta les negaran la entrada. El primer barco en arribar ha sido el Dattilo, con 274 personas a bordo, que ha atracado poco antes de las 07:00 horas. El Aquarius, que trasladaba a 106 migrantes, entre ellos los considerados más vulnerables, ha entrado en el puerto de Valencia sobre las 10:30 horas. El Orione de la Marina Militar italiana, con 250 personas a bordo, ha llegado alrededor de las 13:00 horas.
El número de llegadas en la últimas horas ha sido tan elevado que han tenido que poner en libertad a unos cien migrantes por falta de sitio. Barcelona es el destino elegido por muchos de elllos, que desde allí intentarán desplazarse a Francia o Alemania.
Este ha sido el desembarco de las emociones, entre aplausos. La gente aquí llora cuando recuerda su pasado, sus países de origen. Libia, meses o años de calvario. Pero también lloran ahora porque están asustados. La mayoría no tiene nada más que la mochila que les han dado aquí y no hablan el idioma. No están acostumbrados tampoco a que les traten bien. Se han desconcertado al principio al ver llegar al personal de seguridad exterior con esos trajes tan aparatosos y llamativos y preguntaban "quiénes son”" y les llamábamos a la calma.
Según han relatado los cuatro rescatados, en la patera viajaban otras 43 personas que se encuentran desaparecidas y que están siendo buscadas desde el sábado por la noche.
El desembarco de los 629 migrantes rescatados por el buque Aquarius en Valencia ha provocado una cascada de emotivas reacciones este domingo. Antes de desembarcar se escuchaban a los migrantes cantar. Las ONG hablan de "día histórico" y aseguran que seguiran con sus misiones para salvar a todas las personas que puedan.
En España hay un sistema de acogida que cuenta con 8.500 plazas para refugiados. Todas las plazas están ocupadas en este momento. TVE ha visitado un centro de Accem en Sigüenza (Guadalajara), donde residen refugiados de Siria, Irak o Venezuela. Allí son atendidos por psicólogos, abogados y trabajadores sociales, que los preparan para su nueva vida. Es el caso de Fadi, un dentista de 31 años que huyó de Gaza y ahora está aprendiendo español. De los 5.000 habitantes que tiene la localidad, 800 son migrantes, "todo un ejemplo de integración", destaca el centro.
En el Aquarius viajan 123 niños, de los cuales 60 lo hacen sin la compañía de un adulto. Las ONG piden que se les brinde atención inmediata, con apoyo psicológico, asistencia sanitaria y el trabajo de mediadores para evaluar los riesgos de cada niño. Este colectivo es especialmente vulnerable "de caer en la trata de personas", por lo que lo más importante es garantizar su seguridad en los centros de acogida de Valencia y Alicante.
El buque humanitario zarpó a Valencia el miércoles y llegará, previsiblemente, el domingo por la mañana. Después de dos días de navegación, los cooperantes trabajan para que el humor de los migrantes no decaiga. Juegos, bailes, música y hasta peluquerías improvisadas, todo sirve para amenizar la travesía hacia el puerto seguro después de los horrores vividos en el Mediterráneo.