Siria donde si no había suficiente tensión, ahora entra en escena Israel. El gobierno sirio ha denunciado ante la ONU el ataque de cazas israelíes contra un centro de investigación militar de Yam-raya, cerca de Damasco. Otras fuentes aseguran que el objetivo era un convoy con misiles tierra aire, de fabricación rusa destinados a la guerrilla libanesa, proiraní, de Hezbolá. Tel Aviv sigue sin comentar si atacó objetivos en Siria.
- El embajador sirio en Líbano contempla la posibilidad de responder "por sorpresa"
- El canciller iraní también se ha pronunciado y ha hablado de "asalto brutal"
- Israel guarda silencio y no confirma ni desmiente
Israel guarda silencio y no responde a las acusaciones del gobierno de Damasco sobre un supuesto bombardeo de su aviación contra objetivos sirios. Hay distintas versiones sobre si el ataque fue contra un convoy de armamento que se dirigía al Líbano, o contra un centro de investigación.
- Las colonias niegan el derecho de autodeterminación y discriminan a los palestinos
- Insta a Israel a poner fin a los asentamientos
- Asegura que la motivación es echar a los palestinos de sus tierras
- Medios estadounidenses aseguran que Tel Aviv informó a Washington
- Israel no ha confirmado ni desmentido el ataque
- Hizbulá cree que "revela lo que está ocurriendo desde hace dos años"
El gobierno sirio informó el jueves de que aviones israelíes habían bombardeado un centro de investigación militar en el distrito de Jamraiya, en la provincia de Rif Damasco, causando la muerte de dos empleados. Israel no ha comentado ni desmentido el ataque ni el objetivo.
Anteriormente, fuentes diplomáticas occidentales en Israel habían asegurado que el objetivo del ataque había sido un convoy militar cerca de la frontera entre Siria y Líbano. Las autoridades libanesas fueron las primeras en advertir de la violación de su espacio aéreo por parte de cazas israelíes.
MIGUEL MOLLEDA (Corresponsal de RNE en Jerusalén).- Damasco ha confirmado el primer ataque directo de Israel sobre su territorio desde que hace dos años comenzó la guerra civil siria y lo ha calificado de agresión contra la soberanía nacional. Israel no ha querido confirmar ni desmentir la información.
Guerra a las bebidas embotelladas. Con esta máquina, la 'Soda Stream', se hacen refrescos con gas sin salir de casa. La fabrica una empresa israelí que, ahora, quiere entrar en el mercado de Estados Unidos. Y, para eso, nada mejor que pagar un anuncio en la Super Bowl, que el año pasado vieron 111 millones de espectadores. Eso sí, cuesta caro: 30 segundos, tres millones de euros. En Estados Unidos, frente a este Centro Comercial, protestan y piden el boicot a Soda Stream, pero no porque prefieran los refrescos embotellados, sino porque la fábrica de Soda Stream está aquí, a diez kilómetros de Jerusalén, en la Cisjordania ocupada por Israel. Piden boicot y sanciones contra las empresas israelíes instaladas en los territorios ocupados y dicen que pagan menos a los trabajadores palestinos y que los discriminan.
- Fuentes occidentales informaron de un ataque en la frontera Líbano-Siria
- Siria dice que han atacado un complejo militar
- Israel había advertido de un ataque preventivo contra el tráfico de armas
Israel ha atacado un convoy en la frontera entre Siria y Líbano, según han informado fuentes diplomáticas occidentales, en un momento de máxima preocupación por presuntos movimientos de arsenales de armas químicas y convencionales. Tanto el Gobierno israelí como el Ejército mantienen silencio al respecto. Según esas fuentes, 12 cazas israelíes habrían invadido el espacio aéreo libanés, algo que confirma el Ejército libanés que ha denunciado violaciones sistemáticas de su espacio aéreo en las últimas 24 horas. El objetivo parece ser un convoy cargado con misiles anti-aéreos. Durante toda la semana, oficiales israelíes habían advertido de la amenaza de que armas de Siria pasarán a manos de Hizbuláh, uno de los principales enemigos de Israel y aliado del régimen de Bachar al Asad. Y, aseguraron, no dudarían en lanzar un ataque preventivo.
MIGUEL MOLLEDA (Corresponsal de RNE en Jerusalén).- Aunque no será hasta la próxima semana cuando el presidente del país, Shimón Peres, llame a la formación del gobierno, el actual primer ministro, Benjamín Netanyahu ya se ha reunido con Yair Lapid, el experiodista y candidato de Yesh Atid, la sorpresa de las elecciones. Tras el encuentro ambos han emitido un comunicado reflejando el buen tono de la reunión. Según la prensa israelí, Netanyahu ofrecerá a Lapid la cartera de Economía o Exteriores. Netanyahu tiene que buscar un difícil equilibrio si quiere tener también el apoyo de los partidos religiosos. El programa de Lapid incluye eliminar las exencioness de que gozan los ultraortodoxos.
Analizamos el futuro inmediato de Benjamín Netanyahu con el profesor de relaciones internacionales en la Universidad hebrera de Jerusalén, Arie Kacowicz , quien considera que "hay posibilidades certeras de que el primer ministro israelí pueda armar una coalición que le permita gobernar, pero le resultará mucho más difícil que en los últimos cuatro años". También asegura Kacowicz que "el centro izquierda y parte de los partidos árabes están a favor de que haya dos estados y hay cierto consenso, incluso en la retórica del primer ministro y de la mayoría de la población israelí y palestina, a favor de que haya dos estados" (23/01/13).
- Empate, a 60 escaños, entre el bloque de derecha y religoso y el resto de partidos
- Las combinaciones son muchas y muy complejas
- La lista encabezada por Netanyahu fue la más votada, con 32 escaños
La formación del gobierno de Netanyahu va a tener complicado conseguir una mayoría amplia en el Parlamento, que le permita gobernar con cierta estabilidad. Estaríamos ante tres posibles escenarios: El primero, pacto con sus llamados 'socios naturales' , el partido derechista judío y los ultraortodoxos., lo que dejaría poco lugar a la paz con los palestinos. Pero aún así, tampoco conseguiría más de 60 escaños de los 120 que tiene el Parlamento. El segundo escenario, el pacto con el partido de centro del ex periodista Yai Lapid, que supondría unas políticas más moderadas, y también negociar con partidos seculares, una política menos religiosa. El tercero escenario y menos probable: un gobierno de centro-izquierda, pero tampoco llegaría a 60 escaños.
La coalición que encabeza Benjamin Netanyahu ha ganado las elecciones legislativas en Israel, aunque ha perdido 11 escaños. El Parlamento ha quedado dividido casi a partes iguales entre fuerzas de derechas y de centro-izquierda, y Netanyahu deberá decidir entre unos y otros para buscar apoyos.
- Su coalición obtiene 31 escaños, 11 menos de los que tenía
- El partido centrista Yesh Atid se coloca segundo con 19
- Paridad entre el bloque nacionalista-religioso y el centro-izquierda
MIGUEL MOLLEDA (Corresponsal de RNE en Jerusalén).- En Israel se complica la formación del nuevo gobierno por el virtual empate entre el bloque de la derecha y el centro izquierda en las elecciones legislativas. Los resultados, con el 99% escrutado, dan vencedor a Benjamín Netanyahu, pero con 11 diputados menos. Netanyahu anunció su intención de formar un gobierno con la mayor base posible, con lo que necesita al menos 61 diputados. La clave para la creación del Ejecutivo será el partido Yesh Atid y su líder, el experiodista Yair Lapid.
- No tiene ninguna experiencia política previa
- La plataforma del partido ha apelado a los intereses de la clase media laica
- Ninguna mención a los palestinos en el programa
La coalición derechista Likud Beitenu, que lidera el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, obtiene 31 escaños de los 120 del Parlamento, con cerca del 96 por ciento de los votos escrutados, mientras que el partido centrista Yesh Atid se mantiene en segunda posición con 19.
Los primeros resultados oficiales de las elecciones israelíes, con el 16,3 por ciento de los votos escrutados, confirman por el momento la victoria de la coalición derechista encabezada por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y la segunda posición para el partido de centro Yesh Atid.
La formación de Netanyahu, Likud Beitenu, obtiene el 24,74 por ciento de los votos, mientras que Yesh Atid, liderado por el periodista Yair Lapid, consigue el 13,51 por ciento, a escasa distancia del Partido Laborista, con un 12,46 por ciento, informó la Comisión Central Electoral en su página oficial en internet.