Londres se ha despertado este jueves con más seguridad en las calles y con los alrededores del Parlamento, una de sus zonas más turísticas y transitadas, cerrados al tráfico mientras continúa la investigación tras el atentado del miércoles.
Las banderas ondean a media asta sobre el edificio del Parlamento, uno de los lugares más icónicos de la ciudad, donde se encuentra el Big Ben.
Los parlamentarios han guardado un minuto de silencio a las 9:30, hora local, para recordar a las víctimas antes de iniciar su sesión ordinaria. Una de las víctimas, Keith Palmer, era un Policía que custodiaba la entrada al recinto y que murió acuchillado por el agresor.
La policía metropolitana de Londres ha confirmado siete detenciones en diferentes operaciones a lo largo de la noche en Birmingham, Londres y otros puntos del país. Se cree que el atacante actuó solo. Scotland Yard también ha confirmado que los fallecidos tras el ataque terrorista ante el parlamento británico son cuatro y no cinco como se creía.
Varios españoles han narrado cómo vivieron el atentado en Londres. Adriana, periodista, que iba de camino al trabajo en un autobús urbano, cuenta como "se ha notado el terror porque la gente caminaba de Trafalgar Square hasta el Parlamenteo asustada".
Además, Beltrán, un estudiante de un colegio de Las Rozas de Madrid, afirma que la policía les ha retenido en las cabinas de la noria de Londres. Por último, Marta se encontraba en su oficina cuando se produjo el atentado y ha destacado la presencia policial pocos minutos después de los hechos.
El Gobierno español no tiene constancia por el momento de que haya españoles entre las víctimas del atentado terrorista perpetrado en las inmediaciones del Parlamento británico, en Londres. Los servicios consulares del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación han activado sus protocolos, sin que por el momento se tenga constancia de que algún español se encuentre entre las víctimas. Tres ciudadanos españoles que se encuentran trabajando en la capital británica, Adriana, Beltrán y Marta, han contado a TVE cómo han vivido este trágico día. 22-03-2017
Hasta ahora los peores atentados que ha sufrido el Reino Unido fueron aquí, en el metro de Londres. El 7 de julio de 2005, tres jóvenes británicos de ascendencia pakistaní, hacen estallar sus mochilas, cargadas de explosivos, en tres líneas diferentes. Una hora más tarde, un cuarto atacante explosiona su mochila en un autobús. La cadena de atentados deja 56 muertos, incluyendo los terroristas.
El último ataque en Londres, considerado terrorismo de corte islamista era, hasta el momento, el que se produjo el 22 de Mayo de 2013. Dos británicos, de origen nigeriano, atropellaron y después acuchillaron al soldado Lee James Rigby.
Londres volvía a temblar y entre alertas y sobresaltos, con la gente pegada a la pantalla, aparecía en todas las televisiones la imagen de quien -para la prensa británica- es ya un héroe: Tobías Ellwood. Fue este diputado conservador quien intentó salvar la vida al policía apuñalado dentro ya del recinto del Parlamento, a la sombra del Big Ben.
Cuatro personas han muerto y hay 20 heridas por el ataque terrorista de esta tarde en Londres. Entre ellos está el atacante, que primero ha atropellado con un todoterreno a varias personas en el puente de Wenstmister. Después ha entrado en el recinto del parlamento y ha apuñalado a un policía antes de ser abatido por otro agente.
Cuatro personas murieron y otras veinte resultaron heridas en el atentado perpetrado este miércoles ante el Parlamento británico, según ha informado un portavoz de la unidad antiterrorista de Scotland Yard.
En Londres, un policía fue apuñalado y un presunto asaltante abatido por la policía en las inmediaciones del Parlamento de Westminster. El área está acordonada y el servicio de metro ha sido suspendido en la estación de Westminster.
El atacante ha sido abatido a tiros en un incidente que las autoridades británicas ya han calificado de ataque terrorista. La Policía Metropolitana cree que el ataque es obra de una sola persona, pero la investigación continúa abierta y piden a la población "que esté vigilante".
El pánico se ha apoderado de los alrededores del Parlamento de Londres. Un hombre apuñalaba a uno de los policías que montaban guardia junto al edificio. Otros agentes disparaban contra él. Decenas de personas huían aterrorizadas al oir los disparos. En seguida llegaba un helicóptero de emergencia para atender a los heridos. Se acordonó la zona y se cerró el edificio. También se cerró la estación de Westmister, la más cercana. En un primer momento se creyó que un incidente separado.
Una mujer murió en el ataque terrorista perpetrado este miércoles en Londres, donde un vehículo arrolló al parecer a varias personas en el puente de Westminster. Al menos diez personas resultaron heridas en el incidente del puente, según testigos, mientras varias ambulancias y paramédicos atienden a varias víctimas en el lugar.
Según los medios, un vehículo gris atropelló a varias personas en el puente de Westminster, próximo al Parlamento, antes de continuar el trayecto hasta el edificio parlamentario.
Tras estrellar el vehículo contra las rejas que rodean el Parlamento, el conductor salió del coche, apuñaló a un policía y, cuando se disponía a atacar a otro, los agentes del orden que estaban en el lugar le dispararon, según el relato de testigos.
Scotland Yard informó trata el incidente como un atentado "terrorista", que ocurrió poco después de que terminara la sesión semanal de preguntas a la primera ministra, Theresa May, en la Cámara de los Comunes.
Las sesiones parlamentarias han sido suspendidas y nadie puede salir o entrar del Parlamento, a excepción de la primera ministra, a quien la policía sacó del edificio para que se desplazara a Downing Street, desde donde supervisa el operativo.
El palacio de Westminster ha sido clausurado y ha suspendido su actividad después de que un hombre saltara la verja del Parlamento y apuñalara a un vigilante, provocando un tiroteo posterior y varios atropellos
Medio siglo de música no es fácil de resumir. Tampoco lo es la personalidad artística de una banda ya mítica, Pink Floyd. Ahora el museo Victoria and Albert de Londres les va a dedicar una gran exposición. Eso sí, con un título inquietante: 'Pink Floyd y sus restos mortales'.