Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

En Afganistán, tres años después de su regreso al poder, los talibanes hacen un desfile militar en la base de Bagram, antigua fortaleza estadounidense. Desde el verano de 2021, el régimen talibán está aislado internacionalmente, acusado de cometer asesinatos extrajudiciales y torturas y de negar los derechos más básicos a las mujeres. En aquel agosto, España consiguió evacuar a 3.900 afganos. TVE ha estado con tres refugiadas que viven en nuestro país y que piden que Afganistán no caiga en el olvido, eclipsado por otros conflictos.

Tres años después de la vuelta de los talibanes al poder, Afganistán vive sumido en la pobreza, el aislamiento y la inseguridad. La peor parte se la han llevado las mujeres, que sufren lo que Naciones Unidas califica de un apartheid de género. Esta fue una de las imágenes que dio la vuelta al mundo: miles de afganos tratando de salir desesperadamente del país en aviones programados para expatriar solo a extranjeros. Huían del régimen talibán, que se imponía de nuevo en Afganistán 20 años después de su derrocamiento. En cuestión de días, los talibanes tomaron Kabul y se hicieron con el control de todo el país. 

Foto: EFE/EPA/SAMIULLAH POPAL

Buscar la reinserción de las mujeres que han sufrido violencia de género es uno de los objetivos de la asociación LIVEN, asentada en Almendralejo, en Extremadura, desde hace unos años. Allí forman a perros de asistencia que acompañan a las víctimas durante las 24 horas del día. Sin embargo, la finalidad va más allá de formar a los perros, de modo que también forman a las propias usuarias como adiestradoras profesionales de "perros bloqueo" con el objetivo de poder reinsertarse laboralmente. Los datos reflejan que desde la llegada de estos, el número de intentos de asesinato ha disminuido en España. Por el momento, la asociación se autofinancia, ya que el perro de acompañamiento no es un recurso que ofrezca las administraciones. 

La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha asistido este miércoles al minuto de silencio convocado como repulsa por el asesinato machista de Mónica, la mujer cuyo cuerpo fue hallado tras un incendio en una vivienda de Valladolid.

Redondo ha querido lanzar un "mensaje de esperanza en un momento difícil". La violencia de género, ha reconocido, "es el problema de derechos humanos más importante de la sociedad española". Sin embargo, hay un "triple frente" para combatirlo. "Primero las administraciones con leyes, reforzando instrumentos. El sistema VioGén funciona. Hay 4.527 mujeres en este sistema en Castilla y León, 2.903 protegidas por la policía. Los sistemas funcionan, salvan vidas, reforzar esos sistemas es prioridad del Ministerio", ha declarado la ministra.

Redondo ha destacado que en este caso no había denuncia previa de la víctima. "Es necesario que el entorno victimas sean conscientes de que su denuncia es fundamental. Estamos ante un caso de violencia no denunciada, muchas veces no se puede pedir a las mujeres que denuncien, pero sus entornos sí". 

En tercer lugar, la ministra ha destacado el papel que debe desempeñar la sociedad, "que es igualitaria, solidaria y democrática". "Necesitamos que la sociedad se implique todavía más. Ni un paso atrás y tolerancia cero frente a la violencia machista", ha concluido.

Foto: EUROPA PRESS/CLAUDIA ALBA

El año pasado, un informe de una de las mayores consultoras de España analizó 45 empresas. La conclusión a la que llegaba es que apenas el 6% de las direcciones generales las ocupaban mujeres. Poco después, otra consultora llegaba a la misma conclusión. En España, Francia, Países Bajos, Suiza y Reino Unido solo un 24% de los cargos directivos son femeninos. Aunque cada vez hay menos mujeres en puestos de decisión, la percepción de la sociedad es distinta. Sara Berbel, escritora, especialista en liderazgo y género, apunta que esta dicotomía se produce por los prejuicios, tanto racionales como irracionales. "La percepción, como se oye hablar de leyes, es de que ya se ha conseguido la igualdad. Y no es así, al contrario, estamos en un momento de cierto retroceso". Sara Berbel insiste en la importancia de que haya mujeres ocupando estos cargos porque, en primer lugar, es "fundamental por justicia social". Además, señala que aquellas organizaciones que cuentan con mujeres en sus equipos directivos tienen más beneficios: "Cuando no hay mujeres, se está desaprovechando el talento de la mitad de la población. Lo que funciona mejor son los equipos mixtos”.