Los médicos empezaron a recetar fentanilo para el dolor, pero ahora lo introducen en Estados Unidos los cárteles mexicanos de la droga. Es 50 veces más potente que la heroína, y provoca más muertes que las armas de fuego, con 1.500 fallecidos cada semana en el país por sobredosis de esta droga.
El hijo de Cristina Rabadán Diehl, Jonathan, murió en 2019 -con tan solo 28 años-, a causa de una sobredosis de heroína, xilacina y fentanilo . "Era una persona muy empática, sensible y muy familiar", cuenta, al tiempo que subraya que "él no quería morir".
"Producirlo es muy barato", dice Rabadán, quien también es farmacéutica de formación. Busca ayudar a los demás con su testimonio, porque "lo que nos ocurrió a nosotros le puede ocurrir a cualquiera", subraya.