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El presidente del Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha advertido al Gobierno que "la agenda legislativa no puede depender de una tecla mal pulsada" sino que "tiene que lograr la estabilidad a través del bloque de la investidura". Así se ha referido en La Hora de La 1 a la votación de la reforma laboral que salió adelante por un solo voto, debido al voto erróneo de un diputado del PP. También se ha mostrado crítico con ERC, que votó en contra, y ha dicho que "podría haberse abstenido" y ha calificado el voto en contra como "un acto de irresponsabilidad". En relación con los dos diputados de UPN que votaron en contra de la convalidación del decreto ley, Jaume Asens ha dicho que lo "más grave" es el "tamayazo 2.0, esa compra de votos" que hizo que "rompieran la disciplina de voto" de su partido. Aunque en este caso, ha dicho, "a diferencia de Murcia, "no sabemos el precio" y estuvieron "engañando a los periodistas, al Gobierno", con el objetivo, ha afirmado de que "no tuviera margen de buscar otros apoyos". Sin embargo, ha dicho, ese "plan oculto basado en el engaño no triunfó porque hubo un error humano como los que se producen en cada votación". Se trataba, según ha dicho, de "una emboscada" la prueba de ello es, según ha dicho, que "los diputados engañaron a la opinión publica, cambiaron su posición" y por eso, ha agregado, "parece que había un concurso de voluntades entre el PP y ellos". También ha dicho que "muchos comentaban que los habían visto a lo largo del día hablando con diputados de Vox y del PP", y ha agregado "la trama existe".


Foto: El portavoz del Podemos, Jaume Asens en rueda de prensa en el Congreso de los Diputados. EFE/Fernando Alvarado

El consejo político de UPN confirma el ultimátum a los dos diputados que rompieron la disciplina de voto en la tramitación parlamentaria de la reforma laboral.  Sergio Sayas y Carlos García Adanero, que cambiaron el sentido de su voto en contra de las instrucciones de la dirección, que les había ordenado apoyar la reforma laboral, deben entregar el acta o afrontar la expulsión.  A pesar del ultimátum, Sayas y Adanero mantienen que no van a dejar sus actas como diputados y avanzan que van  a continuar defendiéndose ante los órganos del partido.  En la polémica, el PSOE insiste en que el PP estuvo implicado para hacer fracasar la reforma laboral, pero Pablo Casado asegura que no han tenido nada que ver en la decisión de sus diputados.

InformaPilar Segovia

El Consejo Político de UPN se ha reunido este sábado de forma extraordinaria y ha avalado la propuesta de expulsión del partido a Sergio Sayas y Carlos García Adanero si estos no entregan sus actas. Los dos diputados rompieron la disciplina de voto del partido y votaron en contra de la reforma laboral. Por el momento, ninguno de ellos se plantea renunciar a su escaño.

FOTO: El diputado Sergio Sayas atiende a los medios de comunicación al termino del Consejo Político de UPN. EFE/ Jesús Diges.

Unión del Pueblo Navarro reúne a su Consejo Político para debatir la situación de sus dos diputados en el Congreso, que se saltaron la disciplina de partido y votaron en contra de la reforma laboral. Con toda probabilidad el Consejo ratificará su petición de que los diputados entreguen sus actas, como acordó ayer la ejecutiva. De lo contrario serán expulsados de UPN.

FOTO: El diputado de UPN, Sergio Sayas, a su llegada a la sede de Unión del Pueblo Navarro (UPN). Eduardo Sanz / Europa Press

A priori la votación en el Congreso parece sencilla. Aun así, no es la primera vez que se comete algún fallo. En 2017, Mariano Rajoy votó en contra de sus propios Presupuestos, mientras que por su parte Pablo Iglesias votaba a favor ante el aplauso de los diputados del PP. En la Asamblea de Madrid también se han cometido errores similares, en 2018 Cristina Cifuentes no apretó el botón y como resultado salió adelante la enmienda de Podemos de la Ley de Universidades de su propio partido. En 2015 Pedro Sánchez, votó a favor de la ley del aborto de los ‘populares’ y más tarde tuvo que aclarar la situación en redes sociales También, Jaume Asens, firme defensor de la Ley Celaá, cuando llegó el momento de la votación, por error se posicionó en contra. Cara de sorpresa también, la del exministro Wert, al ver a Soraya Sáenz de Santamaría votar a favor de su reprobación. Y si algo tienen en común todas estas situaciones, es que el voto nunca se modificó después.

Faltaban 15 minutos para la votación. La bancada del PP tenía algunos escaños vacíos y al fondo Cuca Gamarra le decía a Batet que uno de sus diputados había tenido un problema informático con su voto telemático y le pedía que le dejara votar presencialmente. El diputado se personó en la Cámara, aunque según el PP estaba en Cáceres.

Pero la respuesta es no: según el Congreso, los letrados habían comprobado que no ha habido ningún error. Este viernes, el presidente del PP cambia de palabras y ya no habla de error informático, sino de "un problema con el voto telemático".

Desde el PSOE acusan al PP de comprar a los dos diputados de UPN que incumplieron la disciplina de voto con conversaciones informales durante toda la mañana: "Estrategia totalmente planificada".