La actriz Silvia Abascal ha recibido la primera ovación de los premios Goya no por un premio recibido, sino por subir a presentar el Goya al mejor actor de reparto cuando todavía se recupera de la hemorragia cerebral que sufrió el 2 de abril de 2011.
La actriz ha tenido que esperar a hablar por la ovación recibida de un auditorio emocionado hasta las lágrimas. "Estoy feliz de estar aquí, escuchándome fuerte el corazón, mirándoos a los ojos y poder decir gracias", ha dicho tras entrar en el escenario apoyándose en Miguel Ángel Silvestre.