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Internet se ha convertido en una potente fuente de información, pero pese a las ventajas muchos ciudadanos se muestran preocupados por lo que se dice de ellos en la red , así lo refleja un reciente estudio que pone de manifiesto que España es uno de los países más sensibilizados con la reputación on line. En los últimos años ha crecido el número de ciudadanos que trata de ejercer su derecho a desaparecer de internet, está preocupación también es compartida por la Comisión Europea que pretende recoger esta realidad en el nuevo Marco europeo de protección de datos.

El director de la Agencia Española de Protección de Datos, José Luis Rodríguez Álvarez, nos recuerda que toda persona tiene derecho a la privacidad y que cuando se accede a internet tal derecho no desaparece. Entre otras cosas, nos dice que se pueden exigir responsabilidades cuando se cuelga en la red sin consentimiento nuestra imagen grabada con un teléfono móvil (07/02/12).

La Agencia Española de Protección de datos asegura que los españoles están cada vez más concienciados con el valor de su privacidad en internet. El año pasado recibieron un 50% más de reclamaciones con respecto a 2010. Este fin de semana se ha celebrado el día Europeo de la Protección de datos.

Explicamos algunas técnicas fraudulentas utilizadas para suplantar los datos de los usuarios en internet, y ofrecemos algunas recomendaciones para evitarlas.

En los últimos años han proliferado, notablemente, los portales de compras on-line. El paso previo para poder hacer compras en la red es rellenar un formulario con nuestros datos personales y crear una cuenta de usuario. A pesar de que estos portales son cada vez más seguros, se siguen dando casos de terceras personas que dan de alta a otras en estos sitios web o suplantan su identidad.

Después de las vacaciones en muchas empresas se repite la misma escena, trabajadores que emplean una parte de su primera jornada en limpiar de correos electrónicos su buzón de mensajes.

Algunos serán spam, una definición que abarca a las comunicaciones solicitadas por vía electrónica.

Una práctica que se realiza de forma abusiva e indiscriminada.