El Gobierno ha aprobado este martes la subida del salario mínimo interprofesional (SMI). En paralelo, Hacienda ha decidido que por primera vez el SMI tributará en el IRPF. Esto ha desencadenado en un enfrentamiento entre Trabajo y Hacienda que se ha hecho patente en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha aprobado la medida. La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha lamentado que se haya enterado "por la prensa" que no se adaptará el IRPF a la subida del SMI para mantenerlo exento de la tributación. La ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha negado que esto sea así.
Choque en el Gobierno de coalición por la tributación del SMI. El secretario general de CC.OO., Unai Sordo, ha dicho en el informativo 24 horas de RNE que la subida del SMI es "histórica" y ha mostrado su enfado y ha criticado que "se haya visto opacada por una polémica que se podía haber evitado." Sordo ha considerado que los que menos ganan no deben asumir cargas fiscales y ha señalado que la reforma fiscal que "necesita España" tendría que "ir destinada a gravar las rentas que proceden de rendimientos distintos a los salarios que ya pagan lo que tienen que pagar: las rentas del capital, las especulativas, etc." El secretario general de CC.OO. ha insistido en que en España "se debe cumplir que nadie que cobre el SMI se lleve a casa menos del 60% de la media salarial que existe".
El Gobierno regularizará a 26.000 migrantes afectados por la dana, Sordo ha confesado que esta iniciativa se propuso desde CC.OO. y ha señalado que "España va a requerir de millones de migrantes en los próximos años para que el país no se pare" y que por tanto, el debate no está en si "migración, sí o migración, no" sino que es "migración, cómo." El secretario general de CC.OO. también se ha mostrado preocupado por las políticas arancelarias del presidente de EE.UU. y ha dicho que "estamos ante el mayor riego reaccionario desde mediados del siglo pasado" y que "los derechos humanos están en serio peligro."
Por primera vez, algunos trabajadores que cobren el salario mínimo tendrán que tributar su renta. El Consejo de Ministros de este martes ha aprobado la subida a 1.184 euros mensuales en 14 pagas. No obstante, fuentes de Hacienda han confirmado que no elevarán el tramo mínimo del IRPF para dejar exenta la cuantía, como era habitual hasta ahora para que el impuesto no absorbiera el incremento.
“Es difícil estimar qué porcentaje va a ser… Se habla de cerca de un 20% o alrededor de medio millón de personas, pero es complicado porque habría que conocer las circunstancias personales de familiares de cada uno”, explica en Economía en 24 horas Carlos Cruzado, secretario general del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha). También habría que examinar si tienen aplicadas otras deducciones, mientras que las empleadas del hogar seguirían sin tener que tributarlo. “No es fácil estimar a cuántos va a gravar”, matiza.
Hacienda calcula que recaudaría 150 millones de euros más con ese medio millón de personas que pagarían un 2% de IRPF cobrando el SMI. “Planteamos que se ajuste esa reducción por rendimientos de trabajo para que no tengan que tributar estas personas, siempre y cuando se mantengan los límites”, explica Cruzado.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no ocultaba su enfado este martes por la tributación del IRPF del salario mínimo interprofesional. La aprobación de la última subida, hasta los 1.184 euros al mes en 14 pagas, se ha aprobado ya en el Consejo de Ministros, pero por primera vez Hacienda ha decidido no subir el mínimo exento de pagar. "Nos hemos enterado por ustedes", ha afirmado en la rueda de prensa.
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha mantenido una tensa distancia con la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y cuando esta ha repetido que ha conocido por la prensa la decisión de Hacienda de no eximir el salario mínimo interprofesional (SMI) del IRPF tras la subida, la portavoz ha susurrado: "Eso no es así".
Alegría ha defendido la postura de Hacienda al celebrar la subida del SMI y comparar sus cuantías y tributación a la época de gobiernos del Partido Popular. "Cuando llegamos al Gobierno, quien percibía el SMI percibía 10.300 euros, lo que significaba 735 euros mensuales", ha señalado, por lo que ha insistido en la "buena noticia" del aumento.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y los secretarios generales de CC.OO. y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, respectivamente, han firmado este lunes el acuerdo para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) hasta los 1.184 euros al mes en 14 pagas, con efectos retroactivos desde el 1 de enero de 2025, y del que se ha vuelto a descolgar la patronal.
Reducir la jornada laboral ha sido una de las reivindicaciones de los sindicatos, que han salido a la calle este domingo en 50 ciudades bajo el lema "con los derechos no se juega". Unas protestas convocadas tras el primer rechazo por PP y Junts en el Congreso del decreto 'ómnibus', y que han mantenido pese al acuerdo del Gobierno con Junts.
La subida de precios de los últimos años ha obligado a cambiar nuestros hábitos en casa. Ahora, los precios se han ido relajando y el consumo también se está recuperando. El presidente de la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español, Pedro Barato, ha visitado el informativo 24 Horas para hablarnos de lo que se espera en la campaña de este año. "Si se pone muy barato el aceite de oliva puede provocar una crisis en el sector productor. Se está recuperando, la exportación se sigue manteniendo", ha afirmado.
Desde la organización han hecho una campaña de concienciación en la que denuncian que los restaurantes incumplen la normativa, al rellenar envases sin fecha de caducidad ni marca y exigen más controles: "Las leyes están para cumplirlas y este producto se tiene que poner como se merece, con un tapón irrellenable"
Gobierno y sindicatos han pactado hoy el aumento del salario mínimo interprofesional para 2025: llegará hasta los 1.184 euros al mes en 14 pagas. La subida tendrá efecto retroactivo desde el inicio de año y afectará a más de dos millones de personas que cobran el sueldo más bajo, sobre todo mujeres y jóvenes.
Los sindicatos reconocen que han sacrificado sus peticiones. Defendían subir el SMI hasta los 1.200 euros, pero han obtenido el compromiso de negociar algunas cuestiones como la de evitar que los pluses se incluyan en ese salario mínimo.
Y por quinto año consecutivo, la patronal no firmará este acuerdo. Su presidente lo advertía con antelación. "Es difícil cuando el Gobierno ya marca una horquilla muy por encima de lo que en nosotros podríamos entrar", ha dicho Antonio Garamendi.
Antonio Garamendi, presidente de la CEOE, ha estado en Las Mañanas de RNE con Josep Cuní hablando de varios de los temas que mueven la actualidad informativa estos días, como es el caso de las negociaciones para la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), para las que está prevista una reunión entre los agentes sociales y el Gobierno. La CEOE apuesta por un aumento del 3%, los sindicatos quieren casi el doble y el Ejecutivo un punto medio, por lo que puede haber dificultad para llegar al acuerdo. "Yo creo que el Ministerio de Trabajo se ha equivocado, nos tendrían que haber dejado sentarnos en la mesa como hacemos otras veces", opina Garamendi al respecto.
Explica el presidente de la CEOE que no se niegan a que suba el SMI, pero que plantean que "suba en la misma línea que hemos firmado con los sindicatos para los años 2023, 2024 y 2025, con este margen del 3% que está por encima de lo que es el efecto de la inflación". Sobre la jornada laboral de 37 horas y media que se va a aprobar el Consejo de Ministros de la próxima semana, Garamendi dice que los sindicatos no les plantearon este tema, que de haberlo hecho "podrían haber firmado alguna indicación" e incide en que se trata de una "negociación colectiva": "Si se aprueba esto, salta por los aires una gran parte de convenios que incluso están en vigor. Rompería la confianza de muchos sectores, porque hay algunos que no pueden implementarlo".
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha llamado a expresar en las calles el domingo 2 de febrero el "hartazgo" por la "antipolítica que secuestra derechos de los ciudadanos para mejor gloria de los dirigentes políticos".
Así se ha expresado en una entrevista este viernes en La hora de la 1, en referencia a la movilización convocada junto a CC.OO. para pedir un nuevo paquete de medidas sociales que reactive la revalorización de las pensiones, las ayudas al transporte público y la paralización de los desahucios a familias vulnerables, entre otras incluidas en el decreto que decayó el miércoles con los votos en contra de PP, Junts y Vox en el Congreso de los Diputados.
Álvarez ha acusado a los grupos parlamentarios de "frivolidad" por rechazar un decreto que, ha dicho, "afecta a muchísima gente": "Deberían pensárselo dos veces. Si el Gobierno hubiera hecho los deberes, el resultado hubiera sido otro, pero finalmente la responsabilidad es de aquellos que aprietan el botón a la hora de votar", ha protestado.
Asimismo, el líder de UGT confía en que el Consejo de Ministros publique el martes un decreto de salario mínimo interprofesional (SMI) —cuya prórroga decayó esta semana dentro del decreto ómnibus— y ha presionado para que lo haga con una subida hasta los 1.200 euros, como han propuesto en la mesa del diálogo social. “España tiene un SMI que incumple la carta social europea”, ha denunciado, y ha indicado más tarde que según ese criterio debería estar en torno a los 1.300 euros (es decir, el 60% del salario medio del país).
Finalmente, ha criticado que el Gobierno acostumbre a "apurar" los plazos en la negociación del SMI.