La violencia en Siria ha alcanzado de lleno a Alepo, la segunda ciudad del país, que hasta ahora estaba al margen del levantamiento contra el régimen de Al Asad. Dos explosiones en edificios militares han matado a 25 personas y herido a otras 175. En Homs, principal foco de resistencia, se preparan para el ataque final del ejército.
Mientras el Ejército sirio se prepara para asaltar los barrios suníes de Homs, donde resisten los rebeldes armados, en Aleppo, la segunda ciudad del país, dos explosiones dirigidas contra edificios militares han causado esta mañana al menos once muertos y un número indeterminado de heridos, tanto civiles como militares, según la televisión oficial siria.
Los tanques se concentran frente a los barrios suníes de Homs este viernes, un día después de que los bombardeos sobre la ciudad siria acabaran con la vida de 80 personas. Por otro lado, la televisión siria informa de dos explosiones en la ciudad de Aleppo, la segunda del país, que achaca a "grupos terroristas".
Activistas de la oposición, citados por Reuters, aseguran que en los últimos dos días se ha reforzado la presencia de carros blindados en Homs, lo que hace temer que el Ejército lleve a cabo un asalto final contra los distritos suníes, donde se concentra la oposición a Bachar al Asad.
Los rebeldes, agrupados bajo el paraguas del Ejército Libre Sirio (ELS), se han preparado para intentar resistir. Un portavoz del grupo armado ha declarado que es dificil predecir cuándo se producirá el ataque, pero ha subrayado que las fuerzas leales no tienen suficientes tropas para controlar toda la ciudad.
En la ciudad siria de Homs uno de los objetivos del ejército son los hospitales y ahora es en casas y mezquitas donde se atiende a los heridos. Naciones Unidas ha pedido este jueves al gobierno de Siria que pare los asesinatos, pero la diplomacia cada día que pasa, parece estar más lejos de conseguir una solución. También Libia ha decidido hoy expulsar al personal diplomático sirio en Trípoli.
El Secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, ha lamentado "profundamente" el veto de Rusia y China en el Consejo de seguridad, y lo ha calificado de "desastroso" para el pueblo sirio. Hoy Alemania ha expulsado a cuatro funcionarios de la embajada de Siria en Berlín, acusados de espionaje. Por su parte la artillería del régimen sirio sigue castigando el enclave rebelde de Homs. Fuentes de la oposición Siria cifran en casi 100 los muertos civiles durante esta jornada y en casi 500 desde que empezó la ofensiva del ejército.
MIGUEL MOLLEDA (Corresponsal de RNE en Jerusalén). El Ejército sirio continúa bombardeando Homs, donde han muerto según fuentes de la oposición han muerto decenas de personas en las últimas horas. Turquía no quiere que se estanque la situación tras el veto ruso-chino. Continúa también la guerra de propaganda en la que ambas partes se acusan de atrozidades. El Gobierno de Damasco ha negado la muerte de 18 niños prematuros en Homs, como ayer informó Al Yazira.
La ONU y la Liga Árabe estudian enviar una nueva delegación de observadores internacionales a Siria. El Secretario General de Naciones Unidas considera lamentable la falta de acuerdo en el Consejo de Seguridad.
En Siria siguen los bombardeos por quinto día consecutivo contra la ciudad de Homs, el principal núcleo de resistencia al régimen. Este miércoles, según los grupos opositores, han muerto 50 personas.
La Casa Blanca y sus aliados aumentan la presión diplomática para aislar al régimen del presidente Al Asad. Estados Unidos se está planteando el envío de ayuda humanitaria a Siria, pero no va más allá; Barack Obama teme que una intervención militar desestabilice aún más la región y sigue apostando por soluciones políticas.
Naciones Unidas ha calificado de "ola de terror" contra la población civil el asalto a la ciudad Siria de Homs, en el que el ejército sigue utilizando artillería pesada, tanques y helicópteros. La oposición ha informado de que 18 bebés prematuros han muerto en un hospital por falta de electricidad en las incubadoras.
El bombardeo de la ciudad siria de Homs por fuerzas gubernamentales sirias ha causado la muerte al menos a 47 civiles en las últimas ocho horas, según fuentes de la oposición.
"La electricidad ha regresado brevemente y hemos podido contactar con varios barrios porque los activistas han podido recargar sus teléfonos. Hemos contado 47 muertos desde medianoche", ha declarado a Reuters el miembro de la oposición Mohammad Hassan.
Carros blindados del Ejército han penetrado más aún en el interior de la ciudad, disparando cohetes y salvas de mortero.
La postura rusa choca de frente con la de otros países. España, Francia e Italia han llamado a consultas a sus embajadores. Y los países del Golfo, además, han expulsado a los representantes diplomáticos del régimen de El Asad. En cuanto a Estados Unidos se plantea enviar ayuda humanitaria al pueblo sirio.
Miles de partidarios de Bachar El Asad han recibido con banderas rusas a la delegación de ese país que ha pedido al presidente sirio que de pasos hacia la democratización. Esa petición llega después del veto de Rusia a la resolución de condena de la ONU contra el régimen sirio. La visita coincide con nuevos ataques sobre la ciudad de Homs, el principal bastión de la oposición, donde según el régimen sirio se refugian grupos terroristas. Los rebeldes hablan de hostigamiento sistemático y arbitrario sobre la población civil. Unicef denuncia un aumento de la violencia contra los niños.
