"Salvar a Somalia pasa por aumentar la presión militar contra los terroristas y destinar más ayuda internacional al desarrollo del país". Este jueves líderes mundiales de más de 40 países se han reunido en Londres para decidir el futuro de este país y son algunas de las conclusiones a las que han llegado.
Medio año después de que el país atravesara la peor sequía de los últimos 60 años, los menores siguen siendo los más vulnerables ante una situación de violencia que no cesa.
Por eso, esta organización pide a los líderes mundiales que éste sea uno de los temas que traten en la conferencia internacional que tiene lugar este jueves en Londres, donde representantes de 50 países se reúnen para trazar la hoja de ruta del futuro de Somalia, ante una creciente amenaza de terrorismo que sitúa a este lugar entre los más inseguros del mundo.
Hoy hace seis meses que se declaró oficialmente la hambruna en Somalia. Las oenegés han hecho balance y su conclusión es que se podrían haber evitado decenas de miles de muertes si la ayuda internacional hubiera llegado antes. Ahora, su objetivo es que el presupuesto mundial destinado a cooperación, que bajó un 10% en 2011, no siga disminuyendo.
Cruz Roja teme que la crisis humanitaria que atenaza el Cuerno de África, principalmente Somalia, puede reproducirse en Sudán y en el Sahel.
Así lo ha explicado Alberto de Castro, director adjunto de Cooperación Internacional de Cruz Roja española, en el programa Los desayunos de TVE.
"Está habiendo inundaciones en otras zonas de Kenia (...) y ya hay movimientos de poblaciòn de Sudán a Etiopía. Las lluvias han sido generosas y esperamos que la cosecha sea buena, pero el daño a la ganadería está hecho, hay pocos animales", ha asegurado De Castro. "Ha llegado al Sahel, estamos en las mismas circunstancias", ha añadido.
Cruz Roja ha decidido suspender la distribución de ayuda a los afectados por la hambruna y la guerra civil en Somalia, debido al deterioro de la situación de seguridad y las amenazas de grupos armados. La ONU, en cambio, destaca los progresos realizados en la lucha contra el hambre.
Somalia es el país más corrupto del mundo y Nueva Zelanda el que menos, según un informe difundido este jueves por la organización alemana Transparencia Internacional. Corea del Norte y Myanmar (Birmania) siguen de cerca a Somalia en el ránking de países más corruptos, mientras que Dinamarca y Finlandia son, tras Nueva Zelanda, los que tienen los sectores públicos más transparentes.
En la edición 2011 de su tradicional Índice de Percepción de la Corrupción (CPI), la organización alemana advierte de que solo 49 de los 183 países estudiados aprueban en transparencia percibida de su sector público este año.
Somalia vuelve a repetir como el país peor clasificado con una nota de 1,0 --en una escala donde el 0 significa muy corrupto y el 10 muy transparente--. Nueva Zelanda alcanza este año el liderato con un 9,5.
Entre las grandes potencias, destaca la nota de China --un 3,6-- que se coloca en el puesto 75, y la de Estados Unidos, que con un 7,5 cosecha su peor resultado en 16 años y cae hasta el puesto 24. Alemania y Japón --con un 8,0 cada una-- comparten la decimocuarta posición.
Por su parte, España cae una posición respecto a 2010, hasta el trigésimo primer puesto, aunque obtiene un 6,2, una décima más de la puntuación que alcanzó el año pasado.