Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Para denunciar la inacción de los gobiernos, escolares de todo el mundo han dejado por unas horas las aulas y se han manifestado por las calles de sus ciudades. Estudiantes de Bélgica, Alemania, Reino Unido, Suiza, Irlanda... se suman así a la iniciativa de una adolescente sueca que todos los viernes desde hace varias semanas denuncia ante el parlamento de su país la falta de acción política para frenar el calentamiento global. También en España se han convocado protestas en varias ciudades y para el 15 de marzo estos jóvenes preparan una huelga mundial.

El socialdemócrata Stefan Löfven ha sido elegido este viernes primer ministro de Suecia por el Parlamento en tercera votación, con 115 votos a favor, 153 en contra y 77 abstenciones.

En el sistema sueco, la condición para ser elegido primer ministro es no tener 175 escaños en contra, lo que supone algo más de la mitad de la Cámara.

En las afueras de Estocolmo, en Suecia, han comenzado las conversaciones entre el gobierno de Yemen y los rebeldes huthis que hasta el último momento eran inciertas. Con este encuentro se pretende trazar una hoja de ruta para pacificar el país. Las conversaciones se centrarán en la reapertura del aeropuerto de la capital Saná, en garantizar un intercambio de prisioneros y en un alto el fuego en la ciudad portuaria de Hodeida, principal punto de entrada al país de ayuda humanitaria e importaciones comerciales. Durante el conflicto más de 10 mil personas han muerto y casi ocho millones y medio corre el riesgo de morir de hambre. Nos lo cuenta Cristina Sánchez, nuestra corresponsal en Oriente Próximo.

Stefan Löfven, el primer ministro de Suecia, tiene dos semanas para negociar antes de que se reabra el parlamento sueco. Su partido, el Social Demócrata, ha cosechado el peor resultado de su historia y no le sirve con el apoyo de sus aliados tradicionales (Partido Verde y Partido de Izquierda) para formar gobierno. Löfven rechaza conversar con el partido de ultraderecha, Demócratas de Suecia (SD), y ha hecho un llamamiento a la alianza de centro-derecha liderada por el Partido Moderado. El SD ha mejorado su resultado en casi cinco puntos, consiguiendo el mejor resultado de su historia y consolidándose como la tercer fuerza en el Riksdag.

Suecia afronta un incierto panorama político tras las elecciones generales de este domingo, en las que el bloque gubernamental de izquierda y la opositora Alianza de centroderecha han obtenido casi el mismo resultado y el ultraderechista Demócratas de Suecia (SD) ha subido varios puntos y ha reforzado su papel de árbitro. A falta de escrutar menos de un centenar de los más de 6.000 distritos electorales y contabilizados más del 95 % de los votos, la izquierda aventajaba a la Alianza por unas décimas (40,6 % frente a 40,3 %), aunque las proyecciones de la Autoridad Electoral de Suecia los colocaban empatados a 143 escaños, por 63 del SD.

Pequeñas variaciones porcentuales podrían decantar el triunfo para uno u otro bloque, aunque lo que no cambiará es la victoria del Partido Socialdemócrata, la fuerza política que ha ganado todas las elecciones en Suecia en el último siglo, aunque ahora lo hace con su peor resultado de siempre.

Los suecos votan este domingo en las elecciones generales más abiertas de los últimos años en el país escandinavo. El vandalismo y la inmigración son los asuntos clave en unos comicios en los que los sondeos pronostican el 20% de votos para los ultraderechistas Demócratas Suecos y con un pésimo resultado para los socialdemócratas en el Gobierno.