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A finales de mayo, la Audiencia Nacional absolvió al expresidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps en la rama valenciana de la trama Gürtel, donde estaba acusado de un delito de tráfico de influencias y prevaricación por contratos adjudicados a la empresa Orange Market. Ahora, casi un mes después, Camps ha expresado su deseo de regresar a la primera línea política.

"He hablado con el presidente Feijóo 20 minutos después de la última absolución. Le dije que me encantaría volver a la primera línea política. Estoy con mucha fuerza y muchas ganas, y quedamos en que hablaríamos en cuanto lo viéramos oportuno", ha contado en LA noche en 24 horas, donde ha asegurado que el dirigente 'popular' estaba "receptivo".

El expresidente de la Generalitat ha defendido su decisión de dimitir a raíz de la imputación. "Tuve la gallardía de irme a los tribunales dejando la presidencia de la Generalitat, otros se escapan en un maletero a Waterloo", ha expresado, en una clara referencia a Carles Puigdemont. A pesar del largo proceso judicial -15 años- se ha mostrado como un creyente de la Justicia. "Yo me enfrenté en igualdad de condiciones y los jueces han decidido que lo que se decía que yo había hecho no lo había hecho", ha reiterado, aunque ha pedido que "ningún español pase por lo que yo he pasado".

Hoy comienza en la Audiencia de Barcelona el juicio por el crimen de Igualada, la brutal violación a una menor de 16 años. Se ha aceptado la prueba preconstituida y se reproducirá un vídeo de su testimonio, por lo que la víctima no tendrá que volver a contar lo que sucedió. Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, ha explicado en Las mañanas de RNE que la prueba preconstituida es muy recomendable, sobre todo, en delitos "tan graves que pueden afectar a su seguridad y a su estabilidad mental": "Ofrece muchas ventajas, entre otras, la no revictimización, que es uno de los perjuicios más graves que conlleva la denuncia y el procedimiento". Carmona ha insistido en la importancia de que la víctima se sienta segura y que, para que no se produzca su revictimización, se necesita la colaboración de los medios de comunicación y de todas las instituciones y Fuerzas de Seguridad del Estado. "Que los medios de comunicación estén difundiendo mensajes en contra de la violencia de género lo que hace es aislar al maltratador y, por supuesto, hace una labor importantísima de cambio de conciencia", ha señalado.

La presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género ha expresado que este tipo de casos nos obliga a abrir un debate profundo como sociedad. Así, ha hecho hincapié en que los letrados deben tener "especial cuidado" a la hora de elaborar las preguntas para que las víctimas no se sientan cuestionadas: "El hecho de que una mujer piense que no va a ser creída, desincentiva a veces la denuncia y eso es lo peor que puede ocurrir. No queremos que haya impunidad en estos casos tan terribles"