Según las autoridades locales, al menos 26 personas han muerto como consecuencia de los últimos ataques de Ucrania en zonas ocupadas de Jersón y Lugansk. Mientras, el Ejército ruso asegura que siguen avanzando en el frente del Donbás.
Foto: Edificios de viviendas en Lugansk bombardeados por Ucrania (STRINGER/AFP)
Ucrania ha puesto en marcha una nueva campaña de reclutamiento. Necesita reforzar las líneas del frente ante el avance de las tropas rusas, pero la ley de movilización despierta rechazos y dudas entre los que deberían incorporarse a filas.
Estamos en Prudyanka, en el norte de Jarkov, cerca del frente y de la frontera rusa. Los vecinos de esta zona, que habían ido regresando, viven con incertidumbre tras la nueva ofensiva rusa en este sector, allí se encuentra nuestro enviado especial Fran Sevilla.
Mientras los líderes occidentales conmemoran en Normandía aquel desembarco histórico, en Ucrania la guerra sigue siendo una realidad.
Fran Sevilla está en el norte de la provincia de Járkov, en Kozacha Lopan.
Oleksandrivka, una de las últimas localidades antes de la frontera rusa, es una localidad fantasma: no queda nadie. En esta zona se combate intensamente. A 1km de la frontera rusa se encuentra nuestro enviado especial Fran Sevilla.
La guerra en Ucrania no solo se libra en campo abierto, siendo el entorno urbano uno de los principales escenarios donde se desarrolla el conflicto. En regiones fronterizas con Rusia, civiles se entrenan como soldados en distancias cortas y entre edificios. Los oficiales admiten que su objetivo no es convertir a los civiles armados en militares, pero sí que al menos sepan cómo combatir. Si superan las pruebas, que incluyen dese situaciones de shock hasta entrenamiento intensivo en entornos de guerra simulada, podrán entrar oficialmente en combate.
