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Los desahucios en viviendas habituales cayeron un 20% en 2015 según datos del Banco de España. Se produjeron 902 desahucios en viviendas habituales ocupadas, que representan una parte muy pequeña respecto del total.En 2015, fueron 36.900 los casos en los que se tuvo que entregar el inmueble, un 3,8% menos que el año anterior. Más de la mitad fueron entregas voluntarias al banco, en la inmensa mayoría por acuerdos de dación en pago. Por orden judicial fueron desalojadas casi 18 mil viviendas, lo que supone un repunte del 11% en comparación a 2014, que se concentra en las viviendas habituales vacias. Sólo en 14 casos fue necesaria la intervención de la policía, un 44% menos y únicamente en seis ocasiones se trataba de una vivienda habitual. Según datos del Banco de España, en ocho de cada diez casos de desahucio, la hipoteca que dio lugar a esa actuación se firmó antes del año 2007.

Comprar una vivienda nueva en Madrid o Barcelona, podría ser en breve complicado. Los pisos construidos que durante la crisis se quedaron sin vender desaparecen ahora del mercado. Llegaríamos a un punto en el que habría más demanda que oferta. En Madrid, en 2015, se vendieron 8 de cada 10 casas nuevas. En ese año encontró comprador un 28% de la oferta en toda España, y en 2016 se prevé vender un 10% más, llegando a niveles de 2007.

Los reporteros de Teleobjetivo recogen el testimonio de varios residentes de Ibiza que no encuentran dónde dormir por el elevado precio que alcanzan los alquileres en la isla, y con los que se lucran grupos organizados que arrendan las viviendas a turistas de manera ilegal en la época estival.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha presentado el proyecto Madrid Puerta Norte, que sustituye a la última versión de la Operación Chamartín y reduce de 17.000 a 4.600 el número de viviendas previstas -de ellas 1.000 serían protegidas- y a casi la mitad (1,7 millones) los metros cuadrados edificables. La presentación ha sido en el auditorio del Palacio de Cibeles, en un acto al que no han asistido los promotores de la Operación Chamartín -el BBVA y San José-, cuyo plan queda relegado por este nuevo proyecto municipal de urbanismo.