El sueño europeo del Tau Vitoria se vuelve a esfumar por cuarta vez
- El Tau llegó a estar por delante hasta el tercer cuarto
- El domingo jugará la final de consolación contra el Montepaschi
El Tau no pudo con el CSKA de Moscú en su semifinal de la Final Four de Madrid, y ahora tendrá que jugarse el tercer puesto con el Montepaschi Siena, derrotado en el partido anterior. Los vitorianos jugaban su cuarta final a cuatro consecutiva, y por cuarta vez vieron esfumarse su sueño.
Este año, no obstante, estuvo más cerca si cabe, puesto que el Tau llegó a estar por delante en el marcador al descanso. Un parcial de 17 - 24 en el tercer cuarto dio la vuelta al partido y a partir de ese momento el CSKA no cedió ni un palmo, aunque la presión de los vitorianos en el último minuto llegó a recortar la ventaja de nueve puntos a tan sólo dos a falta de seis segundos.
No fue suficiente la aportación de un gran Rakocevic, máximo anotador con 19 puntos, junto a Planinic y Splitter. A pesar de que parecían tener el partido bajo su control, quedaba en el ambiente la sensación de que faltaba algo, y ese algo era Holden, el verdugo de España en el Eurobasket, dormido hasta el tercer cuarto, en que despertó con un triple.
A partir de ese momento, el resurgir de Holden coincidió con la remontada de los rusos. Por suerte para ellos, nunca habían perdido el ritmo del partido apoyados en Sisauskas (16 puntos) y Smodis.
En el último cuarto el CSKA llegó a ponerse nueve puntos arriba, aunque la ventaja se estiraba y se encogía gracias a la presión del Tau. Mickeal puso al cuadro de Neven Spahija a dos puntos de la prórroga a falta de seis segundos. Había que forzar una personal, pero ésta fue sobre Sisauskas, que no perdonó en los tiros libres y rubricó el marcador.
Grada de leyendas
Al margen del colorido que pusieron los aficionados en las gradas, parte de la atención se centraba en la presencia de personajes ilustres. Entre ellos, el rey Don Juan Carlos, que quiso animar al Tau con su presencia.
Además, la Euroliga quiso homenajear entre semifinal y semifinal a las leyendas del baloncesto europeo presentes en el Palacio de los Deportes. Con motivo de los 50 años de la competición, se dieron cita otras tantas figuras de este deporte, como Juan Antonio San Epifanio Epi, Arvydas Sabonis, Wayne Brabender, Dino Meneghin, Sasha Djordevic o Vlado Divac, entre otros.
Otro que centró la atención de los medios, pero por motivos bien distintos, fue el seleccionador español Pepu Hernández. En el descanso entre ambos partidos se supo que había comunicado al presidente de la Federación Española de Baloncesto, José Luis Sáez, su decisión de abandonar la selección tras los Juegos Olímpicos.