Los empresarios de locales nocturnos acusan a Gallardón de "caza de brujas"
- El Ayuntamiento de Madrid cierra salas emblemáticas como Moma y La Riviera
- Los empresarios estiman que los cierres mandarán al paro a 1.000 trabajadores
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Con "consternación" y "asombro". Así han reaccionado los empresarios de locales nocturnos tras conocer la decisión del Ayuntamiento de Madrid de cerrar varias salas de fiestas famosas en la capital.
La Asociación de Empresarios de Ocio Nocturno (ECO) y la de Empresarios de Salas de Fiesta y Discotecas de la Comunidad de Madrid (ASFYDIS) acusano al alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón de organizar "auténtica caza de brujas" contra los propietarios de este tipo de establecimientos tras la muerte de Alvaro Ussía hace una semana a las puertas del Balcón de Rosales.
El portavoz de ECO, Vicente Pizcueta, ha llamado al Consistorio a la "sensatez" y al "rigor" y ha defendido el "trabajo constante y reiterado" que, a su juicio, está desarrollando la asociación de forma "proactiva" durante los últimos siete años.
"Todo este trabajo se ha visto abortado por un espiral que, magnificada y amplificada, nos sitúa en una auténtica caza de bruzas. Primero, por aquello que se dijo de que había que detener a los empresarios con asesinos en sus puertas. Y luego, por las deficiencias administrativas y órdenes de cese. Y todo en una semana", ha arremetido Pizcueta.
Mil personas al paro
El portavoz de ECO considera que la decisión del Ayuntamiento de Madrid se ha tomado "en caliente" y "atropelladamente" a raíz de la muerte de Ussía, lo que demuestra, en su opinión, la "debilidad e incompetencia" de la Administración municipal. "Es un tiro al plato sobre un sector, algo desconocido en la actividad económica porque, por ejemplo, cuando un desaprensivo hace una barbaridad en una obra, no se le ocurre a nadie prohibir la construcción", señaló.
El portavoz de ECO recordó que el sector de establecimientos de ocio nocturno genera el 2,5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunidad de Madrid, "lo mismo que toda la agricultura y ganadería juntas". Además, señaló que emplea a 100.000 personas, "de las que mil se irán a la calle con el cierre de las discotecas de esta semana".
Según explicó Pizcueta, unos 700.000 madrileños visitan cada fin de semana los locales de ocio y fiestas sólo en la ciudad de Madrid, "lo que supone un respaldo, una confianza y una valoración positiva de los cliente".
El Ayuntamiento ha anunciado este viernes que cierra tres salas de fiesta de la capital, La Riviera, Moma y But, y que tiene previsto clausurar Macumba en los próximos días.